Especiales RASTROS

EL LOTUS “MALDITO” SOBREVIVE

13/03/2021. El mismo Mark 21 que con Jim Clark al comando protagonizó de una de las más grandes tragedias de la F1 en Monza, 60 años después sigue compitiendo, sin estigmas, en pruebas de clásicos en Inglaterra...







Jim Clark había completado alrededor de tres vueltas del GP de Italia de 1961 en Monza, antes de verse involucrado en un accidente que, trágicamente, resultó en la muerte de Wolfgang von Trips, piloto de Ferrari y líder del torneo en ese momento y de 13 espectadores más.

Crónicas de aquellos tiempos dicen que el Lotus de Clark chocó desde atrás a la Ferrari de von Trips, en el inicio de la frenada previa a la Parabólica, proyectándola hacia el lado externo y que, luego de encarar a gran velocidad el terraplén previo al alambrado que contenía al público, este catapultó a la Ferrari  contra la masa humana con el saldo citado...

La controversia se instaló con dramáticos ribetes desde ese mismo momento. Von Trips venía cerrando un lote punteror de cuatro Ferrari después de haber largado desde la pole, dejando en claro que los V6 italianos eran la carta de triunfo en ese primer año donde la cilindrada de los autos de F1 había sido reducida de 2,5 a 1,5 litros. Poco podían hacer los cuatro cilindros de Coventry Climax, BRM, Maserati y Porsche que por entonces equipaban a Cooper, Lotus, BRM y Porsche.

Dominio que, en esos primeros momentos del GP de Italia, se confirmaba plenamente aunque con una salvedad, ¿Qué había sucedido en esas primeras tres vueltas de carrera para que Clark, que había largado 7º, estuviera a la cola del polesitter von Trips, que había cedido su liderazgo inicial y venía 4º? Mucho se habló de las preferencias, a menudo caprichosas, del tiránico Comendatore Enzo Ferrari por tal o cual piloto, a veces condicionados por tal actitud; también se citó un problema con la palanca de cambios y/o la caja de velocidades del auto del por entonces líder del campeonato von Trips y, los más atrevidos, hasta sugirieron una cierta inclinación de los integrantes del equipo hacia el americano Phil Hill.

EL DRAMA DE MONZA

La Ferrari de von Trips es embestida por el Lotus de Clark y encara hacia el terraplén y hacia el público!!...
El Lotus de Clark sigue en loca carrera mientras, atrás, la tierra y el polvo ocultan el drama...
El Lotus nº36, al borde de la pista, y la Ferrari nº4, los protagonistas involucrados en una jornada de luto...

Lo concreto fue que von Trips había perdido terreno, y Clark le mordía los talones cuando sucedió el accidente y luego de unas vueltas inciertas, la carrera continuó con Hill liderando 36 de los 43 giros de la carrera que faltaban en lo que sería, a partir de la muerte de von Trips y la victoria posterior, su despegue hacia la corona de ese año (fue el primer norteamericano en conseguirla) y el primer título de Constructores para Ferrari.

El Lotus en cuestión, Jim Clark, y Colin Chapman, fundador, diseñador y dueño del equipo Lotus, fueron demorados y mientras los dos últimos eran liberados por la justicia italiana, el Mark 21 fue incautado por las autoridades para ser liberado casi cinco años después.

Para entonces, el esbelto F1 estaba obsoleto y cuando las autoridades italianas le anunciaron a Chapman su decisión, el constructor lisa y llanamente, les ordenó que lo desecharan. En ese punto intervino Tom Wheatcroft, a quien ya le rondaba por su cabeza la idea que luego se plasmaría en The Donington Collection, habló con Chapman y este le dijo que podría quedarse con el Mark 21, siempre y cuando fuera a buscarlo a Italia...Desde ese mismo instante, la que en su momento fuera la colección más importante del mundo de autos de F1, sumaba un integrante más...

El Lotus 21 permaneció en el museo hasta hace unos años, cuando el emprendedor Tony Best lo compró para hacerlo correr de nuevo!

Hall & Hall Racing lo restauró primorosamente, utilizando el chasis original (nº934) y realizando cualquier pieza que haya tenido que fabricarse de nuevo, y desde ese entonces, se lo ve dando batalla en carreras históricas junto a otros rivales de tiempos épicos, especialmente, en el escenario más proclive a este tipo de eventos, el legendario circuito de Goodwood.

Luciendo el mismo nº36 que llevara en la fatídica jornada de Monza de hace 60 años, sigue fiel a su origen y pasea  su legado por asfaltos mucho más amigables que la áspera superficie del Rettifilo Centro que –aún hoy- convoca hacia la mítica Parabólica...

Fuente y fotos: Goodwood Revival

+ Hacer "click" en las fotos para ampliarlas...

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