Mientras que hay crisis para las marcas generalistas, que se vuelcan a favor de mercados emergentes para minimizar pérdidas en Europa, las marcas de lujo están viviendo un veranito como nunca tuvieron.
Rolls Royce y Bentley acusaron ejercicios brillantes durante 2013, que los han llevado a ser exitosos, tanto en los mercados tradicionales, como en los mismos escenarios emergentes a donde le apuntaron las marcas generalistas.
Por ejemplo, en China, se venden más Rolls Royce que en cualquier otro lugar del mundo, número determinante que hizo que las ventas de RR durante 2013 ascendieran a 3.630 unidades, record histórico de la marca que representó un 1,5% más que en 2012.

China, EE.UU y Medio Oriente fueron mercados determinantes para Rolls, en cuanto a las ciudades, se destacaron, Taichung, Pekín, Estambul, Beirut, Hanoi, Perth, la ciudad-estado de Dubai, Montecarlo y Marbella, así como también Los Angeles y Londres.
En gran medida, el éxito de la legendaria marca inglesa, hoy propiedad del Grupo BMW, se debió a la apertura de nuevos concesionarios, que ya llegan a los 120 establecimientos en todo el mundo.