En nuestro anticipo de la noticia que hoy se hizo realidad, dimos a conocer las razones que tuvo Carlos Sainz para cambiar el buggy Jeffries de 2013 por el SMG en 2014.
Algunas desavenencias con Nasser Al-Attiyah y cuestiones técnicas a favor del buggy SMG, fueron los temas principales que esgrimió, oportunamente, el español, en un marco que lo tenía predispuesto a continuar a bordo de un vehículo de este tipo en caso de retornar al Dakar (“Si vuelvo al Dakar, será con un buggy…”).

Convencido por sus buenos parciales en la edición 2013 sobre el vehículo de Jeffries, habida cuenta de lo alcanzado por Chabot (7º) y Chicherit (8º) en la edición del Dakar de este año con sendos SMG y relacionado con Philippe Gache, gestor de estos, quien le preparó y asistió el Porsche 911 SC con el que el madrileño ganó el Raid de España de Históricos en 2012, la decisión de correr con uno de los buggies citados, casi “cayó por su propio peso”...
La misma, la comunicó el español vía twitter, como decíamos, quien una vez que lo confirmó amplió, “…afortunadamente, voy a probar suerte de nuevo en el Dakar y espero que esta vez todo vaya muy bien. Es un reto apasionante, física y mentalmente”.

Sorpresivamente, cuando todo el mundo ya palpitaba el “gran duelo de buggies del Dakar”, entre Sainz y Nasser Al-Attiyah, (a partir de su ríspido enfrentamiento con los Touareg en el Dakar 2011), el qatarí resignó esta posibilidad, para pasar a integrar el nutrido equipo del X-raid, junto con Peterhansel, Roma, Holowzycz, Terranova y otros, a bordo de un Mini All4, en el próximo Dakar 2014.