La principal novedad de este MC20 tan particular, según la firma italiana, es que  "actúa como un punto de encuentro entre la audacia de Maserati y el cielo infinito, presentando un especial 'sky feeling'”. Característica destacada gracias a la tecnología de su techo plegable de cristal electrocrómico inteligente PDLC (Polymer-Dispersed Liquid Crystal) que, con tan solo pulsar un botón, puede transformarse, al instante, de transparente a opaco y brindar, además, un impecable aislamiento acústico, con un tiempo de apertura y cierre estimado en 12 segundos.

Con esta ‘carta de presentación’, el spider Cielo de la Maserati MC20 se suma a la hermosa cupé con motor central, anticipa un par de variantes Folgore 100% eléctricas aún en su faceta de desarrollo, aunque promete un diferencial al combinar una experiencia de conducción “con algo de viento despeinándote...”

Como la mayoría de las variantes modernas de superdeportivos convertibles, la MC20 Cielo se diseñó junto con la cupé desde el comienzo de su desarrollo, asegurando que se comprometiera lo menos posible su rendimiento y capacidad dinámica. Todos los MC20 están construidos sobre un chasis  de fibra de carbono (by Dallara, nada menos), lo que significa una rigidez estructural destacada aun tratándose de la versión donde el techo es escamoteable.

No obstante, algunas diferencias estructurales destacan a ambas versiones. La MC20 spider propone capas y estructuras distintas con refuerzos de fibra de carbono aplicados en elementos clave alrededor de la base del parabrisas. El efecto general es una variación de peso muy baja, ya que el convertible solo pesa 65 kilos más que la cupé, inclusive a pesar de incorporar un mecanismo de techo plegable automático.

Lo decíamos, el techo en sí está hecho de vidrio compuesto electrocrómico, que puede cambiar de transparente a esmerilado, y viceversa, cuando una corriente eléctrica circula por su capa interna. Esto, junto con el vidrio trasero-luneta montado verticalmente, asegura la hermeticidad del hábitat.

Esto es algo definido por los dos contrafuertes que se asientan a cada lado del ‘tonneau’, reemplazando la línea fluida del techo y la cubierta transparente del motor. Por lo demás, y salvo la presencia –opcional- de un generosos tridente sobre dicha cubierta, el diseño exterior es bastante limpio, con guiños más suaves a las típicas portillas triples de Maserati casi visibles en la cubierta trasera, y las tomas laterales ahora se asientan libremente en las ‘caderas’ traseras.

Como era de suponerse, la MC20 Cielo utiliza el mismo motor V6/3.0 litros Nettuno de su pariente cupé. Mecánica biturbo, con dos bujías por cilindro, y un sistema de combustión derivado de F1, capaz de generar +630 CV y un par máximo de 730 Nm. La encargada de enviar la energía al tren trasero es una caja A8 de doble embrague, combinación que le permite un 0-100 km/h de alrededor de tres segundos.

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