Borgward nuevamente en bancarrota. La marca de origen alemán, que revivió gracias al capital chino enfocada exclusivamente en siluetas SUV, venía arrastrando una serie de graves problemas económicos a los que no les encontró solución y, lamentablemente, está muy cerca de cancelar el ambicioso proyecto de resurrección de la marca.

En el verano europeo del convulso 2020, marcado por la pandemia del Covid-19, ya se vislumbraba un panorama muy complicado para la compañía, presagio que se cumplió llevando a Borgward a fracasar en los dos escenarios que podrían haberle dado esperanzas: no pudo hacer frente a sus deudas y no encontró ningún inversor para avalar su gestión.

En el año 2008 el nieto del fundador de Borgward, Carl Borgward, creó junto a un socio el Grupo Borgward. El objetivo primario, y principal, de esta compañía no era otro más que rescatar del olvido la que supo ser icónica marca alemana. Tras una largo periodo de búsqueda, el capital chino de Foton Motor, cuya marca-madre es BAIC, entró en escena para aportar los recursos necesarios que permitieran el renacer de Borgward.

En su resurgir, la marca apostó todo a los vehículos tipo SUV. El primer modelo que presentó en 2015 fue el BX7, vehículo al cual le siguieron otras tantas siluetas similares como los BX3, BX5 y BX6 sucesivos. La estrategia por aquel tiempo fue clara: sumarse a la “euforia SUV” para hacerse de un espacio propio, tanto en el competitivo mercado chino como en el europeo.

La información de su debacle se originó en China y si bien Borgward no anunció oficialmente su bancarrota, la misma señala que Foton Motor decidió dejar invertir dinero para mantener activa la marca, gestión consecuente con el hecho de que en los últimos años comenzó a reducir su control sobre la compañía.

Borgward registró en el 2021 sus últimas cifras de ventas en China, su principal mercado en esta etapa moderna (en Europa también se vendieron algunos vehículos, aunque realmente no llegaron a ser populares).

Luego de un comienzo prometedor (más de 30.000 unidades/año en 2016), la mejor temporada en China fue 2019, con más de 45.300 vehículos vendidos, pero el inicio de la pandemia por el Covid-19, trajo consecuencias dramáticas en 2020 y ’21, con 8.700 y 3.500 unidades comercializadas respectivamente.

Todo indica que salvo la irrupción –inesperada- de algún grupo de inversores que quiera hacerse cargo de la marca Borgward con todos los problemas y retos que ello supone, su suerte está echada...

No obstante, habrá que esperar un comunicado oficial de Borgward al respecto, que aclare sobre lo que las redes y las noticias ya adelantan como un hecho.

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