A fines de la semana pasada, el argentino Pablo Di Si, presidente de VW Latinoamérica, anunció una inversión de “más de u$s1.200 millones", que se desembolsarán hasta el 2026 en sus fábricas y centros de desarrollo de Brasil y Argentina, sin especificar el monto para cada adjudicatario.
La inversión estará destinada principalmente al desarrollo y producción de una nueva familia de vehículos de entrada a gama, que reemplazará a los desactualizados Gol, Voyage y Saveiro. El primer modelo confirmado de este grupo sería el inédito Polo Track, versión simplificada y más accesible del Polo, que tendrá plataforma MQB (ya vigente en Polo, Virtus, Nivus y T-Cross) y se fabricará en Brasil desde 2023.
El ejecutivo argentino que confirmó la inversión, amplió que la nueva familia de modelos de la marca a producirse en la región incluiría varias configuraciones diferentes de vehículos de Turismo, y hasta una silueta pick up.
Aunque Di Si no brindó más detalles respecto a esto último, es conocido el largamente rumoreado Proyecto Tarok en Argentina: una pick-up compacta basada en la plataforma del actual SUV Taos de producción nacional, que podría compartir línea de producción de la planta de Pacheco con dicho utilitario liviano.