La marca japonesa anunció los programas Toyota Relax y Lexus Relax, que aumentan el período de garantía hasta 10 años o 160.000 kilómetros, lo que antes ocurra, si se mantienen los servicios oficiales por tiempo o por kilómetros, sin especificar modelos, beneficiando a toda su gama desde el 2011 hasta la actualidad y en todo el territorio europeo.

Esta última, al igual que la garantía estándar, no aplica al desgaste normal de piezas, vehículos por uso profesional (taxis, VTC y autoescuelas), así como tampoco para aquellos que presenten modificaciones como conversión a GLP no oficiales, reprogramaciones, manipulación externa, etc. Es decir, la garantía mantendrá su validez siempre y cuando los vehículos involucrados se mantengan de serie.

Si en el momento de hacer el mantenimiento, el vehículo presentara una avería mecánica o electrónica, previamente deberá resolverse dicho inconveniente para extender la garantía otro año, que bien puede ser a cuenta de la garantía previa o por parte del cliente si es achacable a su responsabilidad (si se comprueba, por ejemplo, uso negligente).

Toyota también ha tenido en cuenta a los clientes que ya no acuden a las revisiones oficiales y les permite beneficiarse de la garantía Relax si vuelven a adoptar el servicio, aunque aplicando un periodo de carencia de 90 días y 3.000 kilómetros para los que hayan pasado más de 24 meses sin visitar un servicio técnico oficial.

Al igual que lo que Kia hizo en su momento (adoptando una garantía de siete años, en principio para los modelos europeos y después en todos), Toyota habrá hecho sus cuentas y determinado que los costos de garantía serían aceptables por el nivel de problemas -relativamente bajos- en aquellos vehículos que han tenido controlados en los últimos años con su red oficial y han usado piezas originales en los recambios.

Según aumenta la edad del vehículo, los clientes tienden a abandonar la postventa oficial ya que se pueden conseguir precios más bajos en talleres independientes, cadenas de mecánica rápida, etc. Tendencia que se manifiesta, prácticamente, con cualquier marca generalista, como Toyota, y también en las Premium como Lexus.

Al respecto, en el caso de clientes habituales, ambos beneficios aplicarán descuentos para ir aliviando dichos costos.

En otro orden, dado que la mayoría de modelos que Toyota está vendiendo hoy día son de gama híbrida, y siendo esta tecnología muy madura  y poco problemática en lo relacionado con su fiabilidad, el presumible aumento de las operaciones postventa favorecerá todavía más las cuentas.

Además, a mediano plazo, esto ayudará a los valores residuales, ya que no es lo mismo transferir un vehículo con todo el libro de revisiones sellado en talleres oficiales que uno que no los tiene. Además, la garantía Relax se asocia al número de chasis, por lo que en caso de venta de la unidad  se transmite al nuevo propietario.

En cuanto a Lexus, la garantía mantiene idénticas características a las de Toyota. A partir de la fidelidad en la postventa oficial, los clientes tendrán 10 años de garantía o hasta 160.000 km en sus vehículos, algo que ninguna otra marca Premium ofrece en la actualidad.

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