Sin duda, Horacio Pagani transita por caminos diferentes…
Cuando normalmente cualquier constructor saca un modelo nuevo equivalente a otro, decreta, o poco menos, que la defunción del anterior.
Cometeríamos un craso error analizar bajo esos preceptos el accionar de Horacio Pagani que, más allá de no tener nada que ver con cualquier constructor, se repropone como un artista, cuya obra hasta puede no tener fin (sino, atenerse a la Sagrada Familia en Barcelona).
Es para nosotros, comunes mortales al fin, tratar de buscar alguna orientación a los designios del creador…
El Revolución, así como suena, es un paso más allá del Zonda “R”. Un paso que si bien es corto, es muy firme.

Avanza sobre dos aspectos primordiales que caracterizan al nuevo Revolución, la aerodinámica y un plus de potencia.
Aerodinámica que se cimenta en un alerón con incidencia variable y la facultad de entrar en pérdida en forma controlada para mejorar la velocidad máxima del vehículo.
Da escalofríos pensar en lo que debe sentirse a esas alturas sin la incidencia del soporte alar y de la mano de un motor que incrementó en más de 50 CV el tope impuesto por el Zonda “R” (de 748 a 800 CV).
Motor que también elevó su torque a nada menos que 74,4 kgm y todo eso, sin aumentar el peso máximo del Revolución que quedó fijado en 1.070 kilos.
Una combinación contenida en un chasis monocasco de carbono y titanio y que transmite la potencia del motor a través de una caja transversal S6 con carcasa de magnesio.

Para destacar es la relación potencia/peso que también aumentó y ahora está en los 748 CV por tonelada. Si tenemos en cuenta que esa era la potencia de la versión anterior del motor Mercedes-Benz AMG V12, podríamos definir al nuevo Revolución como “un Zonda R con 70 kilos menos o con 52 CV más”, impresionante…
Solo se fabricarán cinco unidades, cuatro de las cuales se vendieron en la misma presentación, y también, en consecuencia con el incremento general del vehículo, aumentó su precio que, del millón 640.000 euros del Zonda “R”, pasó a 2.200.000 de la misma moneda en el Revolución.

Como en las última apariciones de Pagani, lo acompañó en la reunión la legendaria estrella cinematográfica Gina Lollobrigida, muy recordada aquí tanto por sus filmes, como por una reunión mantenida con el por entonces presidente Perón, devenida en artista plástica y siempre atenta a cualquier manifestación de ese tipo.
La diva no pudo haber elegido mejor ocasión, aunque esta vez, el artista había decidido montar su obra sobre cuatro ruedas…