"Queremos invitar a los habitantes de Munich a utilizar vehículos eléctricos, pero también que estos sean Jaguar", manifestó el director ejecutivo de Jaguar Land Rover, Ralf Speth, en una de las tantas entrevistas que brindó en ocasión de la entrega de las unidades citadas."Una de las razones por las que queríamos estar aquí era por el tráfico mixto: hay circulación de ciudad, y por otra parte, también está la autopista al aeropuerto", amplió el ejecutivo.
Los vehículos, con una autonomía teórica de 480 kilómetros, forman parte de la intención de la ciudad de Munich, plaza natal de BMW, por reducir la contaminación del aire ambiente.
Además, los viajes serán más baratos, ya que la ciudad estableció un subsidio de 20 centavos por kilómetro recorrido en circuito urbano.
Jaguar, propiedad de la india Tata Motors, comenzó las ventas de I-Pace a principios de este año. El crossover es el primero de una nueva generación de autos eléctricos con diseños más atractivos y autonomía extendida, forzados por las nuevas normas de emisiones que impulsan a los fabricantes a cambiar por modelos con baterías, especialmente, cuando se trata de unidades destinadas al tránsito urbano.
Al respecto, Munich es una de las ciudades alemanas con niveles más altos de contaminación debido a la proliferación durante años de vehículos diesel, lo que motivó que estos, en sus versiones más antiguas, serán prohibidos a futuro.
Los Mercedes representan alrededor del 60% de los taxis alemanes, y sus conductores eligen, principalmente, el sedán Clase E y la marca no comenzará a entregar su crossover EQ C eléctrico hasta 2019.

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