Unos 2.2 millones de libras esterlinas podrían significar el tener o no el magnífico BMW 507 de John Surtees, que será subastado en la famosa semana del Festival Of Speed de Goodwood (12/15-07-2018), cuando el parque automotor más emblemático y prestigioso de la historia, literalmente, cobra vida…
La casa Bonhams será la responsable de la subasta de un vehículo que se perfila como objeto de un remate-récord avalado por el precio de preventa que adelantamos.
Monto que tuvo en consideración una singular historia, que lo llevó a quedar en manos de su ilustre dueño durante más de 60 años!!!.
El conocido como “22GKN” por su patente, fue un regalo que le hizo MV Agusta luego de que John Surtees lograra su primer título en el Campeonato Mundial de Motociclismo de 500 cm3 en 1956.
Surtees había quedado fascinado con el 507 en ocasión de haber visitado Alemania para un GP de dos ruedas, pero debido a que el auto era tan caro -más de £ 3.000-, el recién coronado campeón de 500 lo compró a medias con MV Agusta quien luego se lo cedió quedándose con él hasta el día de su fallecimiento en 2017 (el 10 de marzo pasado se cumplió el primer aniversario).
Pero la historia no se agota allí, a John Surtees le encantaban los BMW y su 507 en particular, especialmente después de que fuera equipado con frenos de disco en las cuatro ruedas, equipamiento que no era de serie en el modelo, por lo que se cree que es el único 507 modificado de la historia.
Sin embargo, el entusiasmo de Surtees por el deportivo alemán de aluminio, diseñado por Albrecht von Goertz, no fue compartido por todos.
El siguiente dueño de equipo que contrató al inglés fue, nada menos, que Enzo Ferrari, con quien ganó el Campeonato Mundial de F1 en 1964, quien no aprobó en absoluto la preferencia de Surtees…
Años después, Surtees confesaría como siguió la historia.
En una entrevista para su cumpleaños nº80 que le dio a Goodwood Road & Racing en 2014, Surtees diría: "El auto con más recuerdos para mí es el 507. Lo conducía yendo y viniendo hacia y desde Italia. Pero cuando me uní a Ferrari, el propio Ferrari me dijo que no le gustaba que manejara un auto alemán, así que tuve que tener Ferrari".
La historia dice que después de manifestarle a Surtees que no podía conducir un auto alemán, Il Commendatore hizo los arreglos para que recibiera una nueva Ferrari. John pensó que era un obsequio muy generoso, hasta que vio que el costo del automóvil, había sido deducido de su primer pago!!!.
Típica trapizonda del controvertido Enzo Ferrari que, sin embargo, no hizo cambiar de idea a Surtees, a partir de lo cual, su 507 pasó más tiempo en el garage de su casa, donde celebró nada menos que 60 cumpleaños con su fiel y único dueño.

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