El hombre que sorprendió a VW haciendo trampas en las pruebas de emisiones cree que hablar hoy de la muerte del diésel es exagerado.
Atsushi Horiba es CEO de Horiba Ltd., el principal fabricante de equipos de medición de emisiones en los motores de combustión. Así que en la actualidad, su negocio siguen siendo los motores, tal y como los conocemos — por más que desde el origen de su compañía, en 1945, Horiba ha demostrado una gran capacidad para adaptarse a los cambios.
“Cualquiera que diga que el 100% de los autos serán eléctricos en el futuro es porque ha leído demasiados cómics. No es una cuestión de tecnología sino de realidad. No es factible construir a escala global la infraestructura que posibilite que todos los vehículos sean eléctricos.
¿Quién, por ejemplo, pondría una estación de carga en medio de un desierto?.
Los vehículos con motores de combustión interna, incluidos los diésel, seguirán siendo necesarios, especialmente, en los mercados emergentes.
Los fabricantes de vehículos que no sigan invirtiendo en motores de combustión interna no podrán sobrevivir a los 15 años o más que todavía quedan para que la tecnología de los coches eléctricos se establezca realmente”.

El CEO de Toyota, Akio Toyoda, se sumó a esta tendencia explicando por qué la empresa que comanda, es cautelosa y muy prudente en su marcha hacia las unidades impulsadas por electricidad.
“Debo decir que no estamos en contra de los vehículos eléctricos. Pero, por ahora, para que las unidades eléctricas cubran largas distancias, necesitan baterías grandes que requieren un tiempo considerable para cargarse.
También está el tema de la duración de la batería, pero como las leyes y regulaciones que fomentan el desarrollo de los vehículos eléctricos entran en vigor en países como China y los EE. UU., los fabricantes no tienen otra opción más que desarrollar vehículos eléctricos o arriesgarse a quedar afuera del negocio.
Toyota no es la excepción, pero somos escépticos respecto a que el cambio hacia los vehículos eléctricos vaya a ser rápido, como algunos sugieren”.

Angela Merkel, canciller de Alemania, por su parte, indicó que, “el diésel será necesario, en principio, como tecnología-puente hacia los vehículos eléctricos. Y si bien en el país, todos los fabricantes de marcas generalistas cuentan ya con modelos eléctricos o híbridos, la industria alemana tiene a más de un millón de personas trabajando, no solo exclusivamente es estos desarrollos”.
La canciller Merkel ha renovado su compromiso de no prohibir los vehículos diésel en Alemania, argumentando que esta tecnología será necesaria durante décadas para reducir las emisiones de dióxido de carbono –que emiten los vehículos propulsados por motores nafteros- y a medida que los fabricantes de vehículos desarrollen modelos eléctricos con mayor autonomía, con costos aceptables y que tener un vehículo eléctrico normalmente operable en cualquier lugar del mapa mundial sea factible.

Fuente: Economía Digital (Nacho Palou).
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