Lo dicho, poco nuevo bajo el sol de Chevrolet con estas nuevas presentaciones de Onix y Prisma: más de lo mismo.
Los precios son el ariete de esta nueva embestida de la marca por captar el segmento más popular de la Argentina (no por nada, en la presentación se apuntó, en primera instancia, al tándem Gol/Voyage como principales rivales) y si juzgamos las ventas totales por marca del último registro de marzo, (VW con 13.790 unidades vendidas y Chevrolet con 11.555) a no dudar que las intenciones están bien avaladas por estos productos que arrancan en los 83.500 y culminan en los 94.000 pesos, con dos años de garantía sin límite de kilometraje.

Y cuando hablamos de avales, hacemos hincapié en mecánica convencional y aceptada (motor 1.4/ 98 CV con caja M5 y tracción delantera) seguridad equilibrada (doble airbag, frenos ABS, faros antiniebla –versión LTZ-) y equipamiento (AA, volante regulable en altura, sistema multimedia MyLink, con pantalla táctil de 7” –sin navegador- , etc), nada del otro mundo, pero alcanza para competir, insistimos, partiendo de precios que le otorgan buenas posibilidades.
Así se dan el lujo de posponer un diferenciador notable, como la presencia de la caja AS6 que recién llegará para fines de año.

Esta última doble presentación de Chevrolet, hasta que en el Salón de Buenos Aires se vean la nueva Tracker y el Camaro que está en etapa de preventa, se fabrica en la planta brasileña de Gravataí, y suman presencia en el segmento B junto con Celta, Agile, Sonic, Cobalt, Classic y Aveo G3, ninguna marca tiene tanto de lo mismo o al menos, parecido, en el segmento B de la Argentina.
Los precios son: Onix LT ($83.500), Onix LTZ ($91.000), Prisma LT ($86.500) y Pisma LTZ ($94.000).