Pero no se vaya a creer que la nueva limusina sólo se destaca por ese disfrutable reemplazo de un pedicuro.
La marca hace hincapié en la inteligencia artificial que, en su gama de funciones, presenta, por ejemplo, conducción autónoma con un “conductor” que reemplaza al usuario-propietario original y que le permite a éste, en medio de un congestionamiento de tráfico, leer el periódico o ver la televisión a velocidades de hasta 60 km/h, lo que promueve una absoluta revisión de las reglas de tránsito y con urgencia!...
Sus rivales, el nuevo BMW Serie 7 y la Clase S de Mercedes son más grandes (unos 37 mm más largos) y más espaciosos que antes pero, ¿Qué tiene que decir el nuevo Audi A8?.
El radio de giro de 1.140 milímetros del A8 es más corto que el de un A4 gracias a la dirección de las cuatro ruedas. Solución que, además, a velocidades bajas, permite que las ruedas traseras giren en dirección opuesta a las delanteras para facilitar la maniobrabilidad; mientras que a altas velocidades, giran en el mismo sentido para ayudar a la estabilidad.
Desde esta cuarta generación del A8, todas las versiones del modelo están equipadas de serie con tracción integral quattro como sistema estándar.
En el interior desaparecieron botones, comandos y teclas, reemplazados con una interfaz de usuario digital con pantalla táctil, a través de gesto y control de voz.
Estacionamiento por teléfono. Utilizable desde ahora en el nuevo A8, cuya función inteligente le permite al usuario “conducir” en forma autónoma el vehículo dentro y fuera de un espacio de estacionamiento utilizando un teléfono inteligente.
El nuevo A8 viene con un sistema eléctrico de 48 voltios ya empleado en el SQ7. Esta configuración "híbrida ligera", propone un sistema de recuperación de energía y un sistema de arranque del motor, además de alimentar el nuevo sistema de suspensiones activas.
Un motor eléctrico de 48 voltios por rueda, en lo que Audi llama “suspensiones inteligentes activas”, donde las cámaras/sensores del automóvil exploran el camino y ajustan la suspensión neumática rueda por rueda en forma independiente, brindan lo que Audi llama "una experiencia de conducción completamente nueva" al ofrecer modos deportivos y de confort de acuerdo con gustos, necesidades y superficie del camino.
El sistema también puede elevar la altura de la carrocería al piso unos 76 milímetros en 5/10 de segundo, cuando advierte riesgos (a través de baches profundos y/u objetos en el camino) para la integridad de la parte baja del auto.
La versión insignia es el A8 propulsado con motor 6.0 litros W12 con 580 CV. Sin embargo, se especula que los más vendidos serán los equipados con las unidades nafteras V6/3.0 litros (340 CV) y turbodiésel V6/3.0 litros (286 CV). En el abanico de propulsores no faltan los V8, destacándose el 4.0 litros TFSI de 460 CV.
Por el momento no hay una versión híbrida completa. Sin embargo, más temprano que tarde, llegará el A8 L plug-in e-tron quattro con un V6 naftero y unidad eléctrica (con 450 CV de potencia conjunta) que puede recorrer hasta 50 kilómetros solo en forma eléctrica.
Como en las versiones precedentes, hay una variante larga distancia entre ejes (LWB) A8 L (130 milímetros más larga) que presenta una particularidad que estuvo ausente en los A8 de generaciones anteriores: un 'asiento de relajación' trasero con sistema de masaje - no sólo para la espalda, sino también incorporado en los reposapiés-, para que las plantas de los pies también ejerzan su derecho a sentirse bien tratadas. Nada mejor ni más placentero después de una larga caminata y que, como dijimos marca la diferencia, ya que, por el momento, ni BMW, ni Mercedes lo traen…

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