“El caso es que el importante crecimiento que está registrando el mercado nos incentivó a impulsar modelos que, si bien en algún caso son más caros, forman parte del aspiracional de buena parte del público”, sintetizó Martín Sorrondegui, gerente de marketing de VW Argentina, lo que, de inmediato, generó nuestra repregunta: ”¿eso también se aplica a la Amarok V6, que costará más de un millón de pesos?”.
“En parte si” –continuó Sorrondegui-, “sobretodo, después de la respuesta que tuvimos por parte de los concesionarios. En principio, las 400 unidades de preventa, ya están colocadas y, de acuerdo a nuestras estimaciones, que siempre tratan de ser muy cautas, de un 5% de unidades V6 vendidas sobre un estimado total de unas 18-20.000 Amarok al cabo del año, ya estamos pensando que el porcentaje podría crecer hasta un 10 o un 15%”, concluyó Sorrondegui.
Con esta última, y sorprendente, declaración no solamente se entendió el motivo de este ‘VW Sport Day’ que VW Argentina implementó para la prensa en el Gálvez, sino que, automáticamente, incrementó las especulaciones sobre un mercado local que, según varios de sus más calificados actores, podría superar con holgura las 800.000 unidades…
Amasando prolijamente estas declaraciones, sin embargo, no pudimos sustraernos de la original propuesta que ponía, ante nuestras limitaciones, los 211 y 220 CV de “los G-Cars de VW”, sin ningún tipo de limitación (a los que, en breve, se le sumarán, el Up! Pepper TSI -101 CV- y luego el impresionante Golf "R" -+300 CV-), salvo por la presencia de conductores calificados en la butaca derecha como para, llegado el caso, informarnos y llamarnos la atención sobre algún que otro exceso.

Realmente, resultó un placer transitar por el más corto de los circuitos del Gálvez (2.126 metros), por la dinámica de los deportivos que manejamos, pero también por los lugares que citamos y que los caracterizan.
El pequeño curvón de entrada es el mismo del nº8, por lo cual ya es un “viejo conocido” nuestro y no presentó dificultad cuando lo transitamos, alternativamente, con Scirocco, Golf y Vento.
Ante “Los Tontos”, surgió nuevamente la inquietud, esa misma que provoca la duda, ya que no se advierte su salida, y que lleva a los desavisados de turno a salirse derecho hacia el pasto (de ahí su nombre).
Y luego, esa insuperable sensación que provoca llegar, rápido, y en estos casos, ‘bien plantado’, a “El Tobogán”, esa bajada sinuosa y veloz con veleidades de montaña rusa.
En realidad, fue una sucesión de satisfacciones al volante, donde se destacaron los 220 CV del Golf GTI y la elegante deportividad del Scirocco GTS, la dinámica de sus motorizaciones y cajas, la capacidad impecable de sus frenos aunque, sin embargo, lo que más nos sedujo fue la polivalencia del Vento GLI.
Una berlina deportiva, ágil, muy estable ante los cambios de dirección, briosa, con la que, como reza el mejor de los halagos, “podés ir de compras al supermercado o a fondo por los virajes del Gálvez”, tal como lo propuso este día tan particular que armó VW…

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