Mazda, Bentley y Lamborghini se han unido a Ford, Aston Martin, Rolls-Royce y Volvo en la lista de los fabricantes de automóviles que no asistirán al Salón del Automóvil de París, que comienza la próxima semana.
Las marcas japonesas, británicas e italianas, en su lugar, se centrarán en muestras y presentaciones más pequeñas, que son menos costosas, brindan una llegada más directa a sus objetivos y ofrecen menos competencia por la atención.
Entre los últimos que adoptaron dicha medida está Mazda, cuyo CEO de la división europea de la marca, Jeff Guyton, manifestó que la participación de la terminal nipona en el Salón de París se canceló porque era difícil para Mazda lograr cierto impacto en una muestra que está dominada por los locales Renault y el Grupo PSA.
Otro de los últimos que se sumó a la tendencia es el Grupo VW, quien no presentará a sus marcas Bentley y Lamborghini, (“las inversiones de las marcas de lujo para estar en París son más elevadas por la competencia que existe en este segmento”) aprovechando para preservar los fondos y destinarlos a cubrir los enormes costos por el escándalo del fraude con las emisiones de sus diesel.
Oficialmente, Bentley declaró que se ausentaba de París para centrarse en pequeños acontecimientos en el mercado, llegando de manera más directa a los compradores.
Lamborghini, por su parte, indicó que su ausencia se debía a que estaba revisando la estrategia general de la marca, teniendo en cuenta la asistencia al Salón e, inclusive, la elección de los escenarios donde buscan destacarse.
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