El decreto de consentimiento de California, forma parte del monto de más de u$s 16.500 millones que VW destinó a los distintos acuerdos con los propietarios de automóviles, concesionarios y controladores de los EE.UU, relacionados con la venta de vehículos diesel equipados con dispositivos para manipular las pruebas de contaminación.
El acuerdo con el citado estado, implica que el grupo alemán pagará u$s 86 millones a California, lugar de radicación de la mayor parte de los cerca de 600.000 vehículos manipulados para engañar a las pruebas y, según el Procurador General de California, Kamala Harris, “VW engañó a los consumidores que buscaban comprar un vehículo ecológico, induciéndolos al error respecto al nivel de contaminantes nocivos que emitían unidades diesel promocionadas como “limpias” de dichas emisiones”.

Lo recaudado con el acuerdo ayudará a pagar becas de investigación, programas de protección de los consumidores y el costo de la investigación realizada por la oficina del Procurador Harris, de acuerdo con el juicio final firmado ayer por el juez de distrito, Charles Breyer en San Francisco.
El acuerdo, también prohíbe a VW y Porsche, la publicidad, venta, alquiler o distribución en California de todos los vehículos que contienen los llamados ‘dispositivos de desactivación’ que se utilizan para engañar a las pruebas de emisiones. El grupo VW tendrá que informar al fiscal general de California, cada año y durante cinco años, sus esfuerzos para cumplir con los términos del acuerdo.

Los costos de VW podría ampliarse si no logra eliminar el 85% de los vehículos afectados de las calles y rutas de EE.UU antes de junio de 2019.
De los 475.000 vehículos con motores diesel de 2.0 litros que deben ser corregidos o recomprados, los propietarios de 210.000 de estas unidades ya se han inscripto para participar en el arreglo.
La mayor parte de estos, así como otros arrendatarios, hasta ahora, han optado directamente por la recompra de sus vehículos por parte de VW.
El grupo también se enfrenta a demandas por parte de los inversores e investigaciones criminales en los EE.UU, Alemania y Corea del Sur.
......................................................................................................................................................