De esta manera, el Grupo VW está tratando de corregir las deficiencias derivadas de más de una década de expansión que incluyen, la adquisición de Scania, camiones para trabajos pesados, Ducati, motos de alta gama e inclusive de la prestigiosa Porsche, entre otros.
El escándalo por las emisiones dejó al descubierto, un enfoque desfasado en materia de crecimiento, convirtiendo al grupo en una estructura rígida, centralizada, que provocó cierta lentitud para adaptarse a los cambios y contribuyó a generar escasas ganancias, sobretodo, para la marca VW.
Esta revisión de la cartera, podría conducir a la venta de ‘activos no esenciales’, dijeron fuentes responsables del grupo. Si bien no se ha decidido todavía respecto a cuales activos son los prescindibles, ni cuanto tiempo llevará esta evaluación, se descarta que, en caso de decidirse el

desprendimiento de los mismos, la lista incluiría a Ducati y al negocio completo de MAN, aunque una oferta inicial fraccionada por la empresa de camiones, que incluye a las unidades Scania y MAN, también podría ser considerada.
"La demanda de vehículos comerciales está en aumento en Europa por lo que una venta de MAN y Scania podría ser muy oportuna", comentó Richard Hilgert, analista con sede en Chicago, quien también agregó, "por otra parte, Ducati es una marca muy venerada y tendrá el valor de un ojo de la cara".
Sin embargo, estas cesiones serían particularmente sensibles para VW, ya que tanto los poderosos sindicatos que participan en el paquete accionario del grupo y el segundo mayor accionista, el estado alemán de Baja Sajonia, no verían con buenos ojos el achicamiento de la compañía.