Luego de las desavenencias surgidas entre el patrón el X-raid -Sven Qandt- y el piloto Guerlain Chicherit (razón por la cual, este último se negó a seguir en carrera con un buggy Zebra que no presentaba problemas insalvables), la responsabilidad del desarrollo en carrera del vehículo estará a cargo de Jutta Kleinschmidt, la única mujer que ganó el Dakar en forma absoluta (París-Dakar 2001, sobre 10.200 kilómetros).
La alemana será navegada por su coterránea Tina Thörner, quien la secundara en sus últimas participaciones en la especialidad.
La rápida decisión tomada por Qandt, está relacionada con la pérdida de tiempo sufrida por la interrupción del desarrollo del vehículo y en previsión que no cambien algunas variables técnicas que favorecen, según Qandt y varios responsables de equipos, a los vehículos tipo buggy (y si no, remitirse al resultado del último Dakar con la victoria del buggy Peugeot 2008DKR).

Además de un programa de tests acordado, Kleinschmidt-Thörner y el Zebra-Buggy (por ahora, propulsado por un motor naftero Chevrolet V8, aunque luego montaría el seis cilindros en línea, TDI, de origen BMW que, actualmente, utilizan los Mini) disputarán varias pruebas, entre ellas, los próximos Desert Challenge de Abu Dhabi y el Sealine de Qatar, lo que las pone en rumbo de participar en el Dakar 2017 que viene.
Según Qandt, “ella tiene mucha experiencia en vehículos 4x2 y habilidad para desarrollar y mejorarlos. Depende de cómo evolucione el reglamento técnico, decidiremos, seguir con el buggy ó con el Mini All4. Aunque de todas formas, continuaremos trabajando con estos para hacerlos más rápidos y confiables”.