Las únicas limitaciones que tiene son, sus medidas (3m40 de largo, 2m50 de ancho y 2m30 de alto), su potencia (apenas, 44 CV) y su peso (1.300 kilos vacío), todo lo demás, parece ilimitado para el Sherp ATV…
Un camión de singulares formas que representa el paradigma de la practicidad, donde cada centímetro de su superficie tiene una razón de ser, convertido en un diseño absolutamente práctico.
Sus enormes ruedas de 1m60 de diámetro le permiten flotar, por sus características TT, logran una tracción óptima sobre superficies resbaladizas, muy rotas o extremadamente irregulares y cuentan con un sistema de autoinflado que se adapta a cualquier tipo de necesidad, sea del terreno o de la situación.

El Sherp ATV tiene una pobre máxima de 45 km/h sobre tierra y 6 km/h en el agua, producto de un motor 1.5 litros diesel de apenas 44 CV al cual va acoplada una caja M5 y, obviamente, tracción integral, pero la velocidad no cuenta cuando estamos hablando de un vehículo capaz de superar cualquier dificultad, incluidos desniveles de más de 30º.
Su creador, el ingeniero ruso Alexei Garagashyan, privilegió un diseño compacto –tratándose de un pequeño camión- de bajísimo peso, con una cabina para solo dos personas y con una caja destinada íntegramente a la carga.

Además de estas particularidades, el Sherp ATV, tiene un sistema muy singular que le permite, girando las ruedas de un solo lado por vez, giros rápidos sin depender de una cremallera de dirección o un eje que gire, tal como lo hacen las mini excavadoras que suelen verse en las obras en construcción.
Los u$s 50.000 que cuesta no son una cifra menor, aunque a la hora de decidir habría que evaluar sus posibilidades, capaces de llevar al Sherp ATV a través de un desierto, un lago, nieve, rocas y cuanto obstáculo usted se pueda imaginar.