EL RINCÓN DE FANGIO
22/06/2015. En el marco del 7º Salón del Auto hay un espacio destinado al piloto más grande de la historia, Juan Manuel Fangio (no muy bien iluminado y algo escondido atrás de un stand de una marca de autos chinos !!!). Precisamente, pasado mañana (24) el Chueco cumpliría 104 años por lo que este lugar adquiere dimensiones épicas, donde Fangio es evocado a través de objetos personales (agenda, casco, guantes, antiparras y algunos trofeos) y varios de sus autos más reconocidos: la cupé Chevrolet TC del ?40, el Simca Gordini del ?48 con el que corrió en Palermo y Rosario, el Mercedes 300 SL para uso particular que le regaló Mercedes-Benz luego de sus títulos mundiales de 1954 y ?55 y sendas réplicas de la Maserati 250F (el auto con el que Fangio logró su última corona en 1957) y del Lancia D24 Panamericana que utilizó para dicha carrera en 1956. Vehículo este último, que es uno de los más admirados por parte de un profesional de larga data y profundo conocedor de vida y obra del Gran Balcarceño, nada menos que Juan Carlos Perez Loizeau, verdadero prócer del periodismo y del mundo del auto (en su haber tiene ocho Martin Fierro, entre otras distinciones) quien nos premia con su sabiduría y afecto en cada ocasión que lo cruzamos.
