Mazda fabricará en su planta de Hiroshima a partir de 2015 el nuevo Alfa Romeo Spider, nombre emblemático, si los hay, para la casa italiana.
Este será un roadster, como era de suponer, con la génesis clásica de la marca que tan bien dejara sentada el modelo apuntado, que tomará como base al Mazda MX-5 de próxima generación.
Paralelamente, Mazda, fabricará su propia alternativa, que tendrá como base dicho modelo cuya nueva versión verá la luz al mismo tiempo que el producto de Alfa Romeo.
Ambos modelos compartirán plataforma y algunos elementos mecánicos, sin embargo, quedarán al margen de esta identificación las plantas propulsoras y el diseño estilístico de cada producto.

En el caso del Spider de Alfa, es muy probable que se utilice el motor 1.75 litros con inyección directa, naftero, de hasta 300 CV, aunque la versión de entrada de gama podría recibir a la nueva generación del 1.4 MuliAir de más de 160 CV.
En el caso del MX-5, su propulsión se basaría en la familia de nafteros SkyG, también con inyección directa y varias opciones de cilindrada.
En síntesis, es bueno conocer que dos deportivos caracterizados continuarán su evolución en el mercado automotriz.
Y para Alfa Romeo en particular, muestra de manera palpable la intención del “supremo” Marchionne de llevar a la marca hacia la clase Premium, a través de un producto prestigiante por su historia y que ahora encara una interpretación moderna y tecnológicamente avanzada para el nuevo posicionamiento de la marca.