PILOTOS DE RAZA
09/11/2014. Faltaba poco para finalizar la prueba de Interlagos y dos realidades incuestionables se manifestaban en pista: el duelo franco por el triunfo, en el marco de la lucha por un título al cual solo ellos pueden acceder, entre Rosberg y Hamilton y, con mucho menos que ganar, dos consagrados, Raikkonen y Alonso batallaban como poseídos por el?sexto lugar!. Realidades muy diferentes propuestas por el dominio absoluto del equipo alemán y la pobre gestión de Ferrari en 2014. Sin embargo, la imagen fue lo suficientemente fuerte como para rescatar, más allá de las distintas realidades mecánicas, la vigencia de la quintaesencia de este maravilloso deporte, la destreza, el temperamento, la experiencia?solo traicionadas por la perversidad de un DRS que no inhabilita a los protagonistas, sino que adultera lo que ellos hacen en beneficio del espectáculo. Rosberg y Hamilton seguirán hasta el final batallando por el título en un año que los tuvo como protagonistas excluyentes, ahora separados por 17 puntos a favor del inglés y con la barrabasada del puntaje doble (50 puntos) de Abu Dhabi como objetivo mayor y determinante. Para Raikkonen y Alonso queda la satisfacción por lo realizado, magra compensación para sus pergaminos, pero que revalida su condición de pilotos de raza. Lo más importante que demostraron ambos casos en Interlagos, fue que quedó en claro que el factor humano de la F1 moderna está asegurado más allá de cualquier artilugio que intente alterar los valores de este hermoso deporte con argumentos que solo promueven la idiotización del soberano? RD