Daimler recibirá otro 1% de participación en Aston Martin, elevando su porcentaje hasta un 5%, a partir del suministro de elementos eléctricos y electrónicos a la marca de origen inglés, en una escalada que forma parte de un convenio más amplio que incluye la provisión y adaptación de motores V8 para los Aston Martin futuros.
Parte de este acuerdo incluye, el estudio y la eventual aplicación de la tecnología de Mercedes-Benz en un SUV que AM tendría intenciones de poner a la venta en 2017.
La marca de origen inglés es una de las pocas de perfil deportivo-lujoso que todavía no fijó pertenencia a ningún grupo automotriz líder, independencia que no le ha hecho la vida fácil a esta empresa que ya lleva 101 años de permanencia en el rubro automotor.

La financiación de tecnología para enfrentar a sus pares, Maserati y Bentley, es uno de los puntos-clave en una instancia que la ha llevado vender 4.200 unidades en 2013, cifra que el mayor inversionista de la marca, Investindustrial (dueño del 37,5% de AM desde diciembre de 2012) pretende incrementar con uno de los programas de inversión más grandes de su historia y del cual forma parte este vínculo con el grupo Daimler.