Probablemente, al vencer las Supersports Race 1 y 2, Michael Dunlop, habrá tenido en cuenta poco más que el éxito personal que lo llevaba a consolidarse como el piloto más ganador de la historia en el legendario TT de la Isla de Man.

Sin embargo, para propios y ajenos, al ampliar su récord, Dunlop, hizo realidad el sueño de muchos seguidores de la prueba road racing más famosa de la historia: que una Ducati vuelva a ganar en el clásico de la Isla de Man después de 30 años de haberlo hecho por última vez.  

Sobre la Ducati Panigale V2 del Milwaukee MD Racing, Dunlop, batió en ambas pruebas a Dean Harrison (Honda CBR600), registrando en la más veloz de ellas (Race 1) más de 205 km/h de promedio y logrando también la vuelta más rápida a más de 209 km/h.

La superioridad de la combinación Dunlop/Ducati fue notoria. En la primera de las dos carreras, aventajó a Harrison por más de 11 segundos, mientras que en la segunda, amplió esa diferencia sobre el mismo Harrison a más de 26 segundos!

Paradójicamente, Dunlop alcanzó su victoria nº30 (Race 1) cuando se cumplían 30 años del último triunfo de Ducati en el mítico Circuito de la Montaña de Snaefell, a cargo del neocelandés Robert Holden en 1995 (Ducati 916) quien, un año después, en el mismo escenario, sufriría un accidente con consecuencias fatales.

Esta fue la 14ª victoria de Dunlop en el Supersport TT y la 7ª con una marca diferente, sumando Ducati a una profusa lista integrada, entre otras, por BMW, Yamaha, Suzuki, Honda y Paton.

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