Varios de los colosos de la industria automotriz europea se han visto envueltos en una serie de desafíos que, cada vez más, amenazan su futuro inmediato. En un contexto donde prevalecen, el colapso de las ventas en los mercados no europeos, particularmente en China, la muy difícil transición hacia la electrificación total, la inflación y la recesión económica en Alemania, la llegada masiva de fabricantes chinos y las fuertes multas relacionadas con el Dieselgate, VW necesita absolutamente hacer grandes ahorros.

Estas razones hicieron que, del rumor se pasara a la planificación para afrontar tamaño desafío. Algo que obliga al grupo alemán a encarar un profundo y extremo proceso de reestructuración interna para adaptarse a “los nuevos tiempos”, el cual los pone ante otro problema que, por tangencial, no deja de ser grave, las implicancias sociales que podrían surgir por dicho proceso en la propia Alemania.

Por lo que se conoció, las medidas sobre las que, previsiblemente, se sustentará el plan de reestructuración interna, indican que el grupo planea cerrar tres fábricas establecidas en territorio alemán. A esto, se sumaría la reducción de la infraestructura y personal de otras plantas nacionales, recortando sueldos en, aproximadamente, un 10% (lo que afectaría a unos 140.000 operarios) y, si con esto no alcanzara, se “congelarían” los salarios de todo el personal activo de las mismas por, al menos, dos años, entre otras medidas a implementarse.

Este panorama tan dramático que propone el grupo, por razones obvias, no marginaría a las marcas que lo componen. Y dentro de este marco, Audi aparece como una de las que más podría ver afectadas sus aspiraciones, especialmente, por su proyecto de F1 que, al margen de esta situación, ya ha tenido sus propios momentos de zozobra.

 Desde que se anunció su desembarco en la F1, hace ya dos años, el programa ha tenido varias “idas y vueltas”. Cambios al tope de la compañía, inestabilidad a nivel de organización y del consejo de administración, la llegada y luego la salida de Andreas Seidl (incluso antes de que el proyecto se concretara) y, finalmente, el regreso de Mattia Binotto al frente del equipo, fueron sólo algunos de los problemas. El tránsito accidentado de la marca-madre ante los inconvenientes que afronta la industria, sumado a los propios generados por el proyecto F1 en ciernes, no hacen suponer un futuro idealmente calmo para la marca de los anillos en la actualidad.

Luego del terremoto del lunes pasado donde, por primera vez en sus 87 años de existencia, VW habló de cerrar tres fábricas en Alemania, nada podrá ser igual en el futuro del grupo.

El mismo espera ahorrar 4.000 millones de euros al año gracias a este plan de austeridad sin precedentes. Y todo indica que cuando es necesario realizar ahorros tan importantes, son los programas “no esenciales” para el funcionamiento del grupo los que están en primera línea y, en especial, los involucrados con el automovilismo…

Vale recordar que, en pleno Dieselgate, el grupo VW decidió detener casi todos sus programas deportivos globales: la marca VW abandonó repentinamente el WRC en 2016, mientras que Audi y Porsche ya habían hecho lo propio, uno tras otro, con su participación en el Mundial de Resistencia (WEC) durante el período. Desde entonces, algunas marcas del grupo han retomado la actividad deportiva a nivel mundial, como Porsche y Lamborghini, pero a través de la configuración LMDh, con costos sensiblemente reducidos a partir de utilizar chasis suministrados por fabricantes externos.

Ante estos antecedentes y la situación dramática planteada horas atrás por el grupo, obviamente, la relevancia del proyecto Audi F1 no parece encajar muy bien. Hasta ahora, la marca ha hecho todo lo posible para asegurar su llegada a F1 en 2026: adquirió el 100% del grupo Sauber a principios de año y desde el anuncio de su desembarco, ha invertido muchos millones en el proyecto, desde la contratación de cientos de personas para el desarrollo de su propia UP, hasta la edificación de nuevos establecimientos en Neuburg.

Costos realizados, que colocan a Audi y al grupo VW en una situación compleja y ante un gran dilema: seguir con un proyecto que, hasta ahora, sólo ocasionó gastos ó detenerlo y buscar un comprador para salvar –en parte- dichos gastos. Creemos que en gran medida, todo podría comenzar a perfilarse a partir del "costo social" que planea y está dispuesto a afrontar el grupo VW ante su intención de reducir sus costos generales a través, en gran medida, de su capital humano. Todo podría depender, entonces, de la magnitud del plan social que se está preparando en Alemania.

Es cierto que el grupo –vía Audi- podría utilizar la popularidad de la F1 como un gran golpe publicitario y como un último intento de reactivar sus ventas globales en Asia, donde su estrategia –particularmente en China- resultó un fiasco. Razón por la cual, se podría suponer que tener en el equipo Sauber a Guanyu Zhou, oriundo de Shanghai y único piloto chino en la F1, podría explicar por qué Audi está tardando tanto en elegir su segundo piloto para acompañar al ya confirmado Nico Hulkenberg en 2025…

En relación a esto último, sin embargo, entre la avalancha de suposiciones –la mayoría, bastante poco confiables- no habría que dejar pasar las que le adjudicaron a Fran Colapinto la posibilidad de ser piloto Sauber/Audi en F1 desde 2025. Tomando el supuesto “con pinzas” y sin entrar en ningún tipo de especulación, el rumor actuó como disparador para estar atentos a los acontecimientos que sucedan a partir de la dramática decisión del grupo VW y como esto podría influir ante una eventual contratación del argentino. De todas maneras, por ahora, creemos que hasta que la situación general del grupo VW no se defina, nada indica que haya un momento ideal para una eventual llegada de Colapinto al equipo.

Por el momento, el anuncio del grupo VW sobre el previsto cierre de tres fábricas en territorio alemán es muy reciente y aún no ha llegado al paddock de F1. Pero no hay duda que el tema estará sobre la mesa durante los próximos GG.PP. empezando por el de Brasil, a partir de este fin de semana en Interlagos.

............................................................................................................................................