Cuando la saga iniciada con las F40/F50, se discontinuó con las Enzo y LaFerrari, como buques-insignia de la legendaria marca italiana, pareció que había tenido una vida breve, quizás más ‘agotada que acotada’. Sin embargo, solo fue un resuello a la luz de esta F80 que se presentó hace horas. No era para menos, el gran paso que se pensaba dar los había puesto en los umbrales de una nueva dimensión…

Porque la nueva y exclusiva Ferrari F80, propone que ese “paso” fue dado avalado (como adelantamos en la introducción) con una aerodinámica tan elaborada que le permite una carga de más de una tonelada a 250 km/h (valor potenciado por la gestión de las suspensiones activas). Combinada con un hábitat que parece diseñado y elaborado sólo para el conductor, con todo el instrumental orientado hacia este y una, curiosa al menos, disposición con una butaca tapizada en rojo para el piloto y la de al lado, “bueno, si te gusta es negra, no tengo otra!”.  El remate que decididamente, ubica a esta singular F80 en otro plano queda a cargo de la impulsión. Con un motor V6 con 120º de apertura entre bancadas de cilindros, basado en la unidad ganadora de las 24 Horas de Le Mans con la 499P, similar a la que también impulsa a la 296 en sus distintas versiones, incluyendo la GT3. Arquitectura que no es extraña en la casa de Maranello, las Sharknose de 1961, en su versión más potente, la utilizaron para darle a la marca su primera Copa de Constructores aquel año y la corona al estadounidense Phil Hill. Abreviando, el V6/2,9 litros entrega 900CV y el resto, para alcanzar una potencia combinada de, nada menos, 1.200 CV, queda a cargo del aporte de tres motores eléctricos (dos aplicados al tren delantero y el restante al trasero). Todo el potencial de este ‘paquete’, es transmitido a través de una caja A8.

Las dudas que podrían argumentar los más quisquillosos, pensando en voz alta, respecto a que quizás sea una exageración hablar de “nueva dimensión”, las disipa el hecho de que esta F80 fue diseñada a partir de una “hoja en blanco” y, salvo parentescos inevitables, no tiene nada que ver con ninguna de sus predecesoras.

Esta “bestia de las ocho décadas”, marca que Ferrari supera con cierta holgura (fue fundada en 1939) tiene una “cara” muy particular. Con faros más finos e integrados a una franja central de color negro brillante, combinación que intentó darle estilo a un frontal cuyo compromiso aerodinámico es más que evidente. Suma un spoiler en el labio delantero y grandes tomas de aire con conductos en “S”, faldones especiales en los laterales y un alerón trasero con gestión activa de acuerdo a las necesidades. Estilo que se traslada a los pilotos traseros, aunque aquí aparecen interrumpidos ante el nuevo compromiso que propone un habitáculo “acristalado” y las grandes puertas de apertura tipo “mariposa”.

Como adelantamos, el conductor cuenta con una butaca bien envolvente, tapizada en Alcantara roja, mientras que en el lado derecho se puede agregar -o no- otra sólo en color negro, en un rasgo impensado para un auto cuyo precio se aproxima a los cuatro millones de dólares. En fin, como diría mi abuela Petra, “hay gustos que son para uno sólo”. Al respecto, Ferrari lo aclaró en su comunicado oficial, el nuevo F80 está pensado solamente para uno, contando con un puesto de conducción centrado únicamente en el conductor, con una gran pantalla digital, personalizable. Hasta la consola central, limitada a un montante vertical, propone una posición muy ergonómica que solo está dispuesta para quien conduce.

Conductor que, cualquiera sea su experiencia, debería conmoverse ante un 0-200 km/h en 5s75/100 (el 0-100, lo hace en 2s15) y los 350 km/h de máxima.

La F80 cuenta con un sistema de frenos carbocerámicos, con un componente principal, desarrollado por Brembo, que incorpora un nuevo tipo de carbono para disipar el calor más rápidamente y reducir la fatiga (tecnología de frenado CCM-R Plus).

El precio de la nueva F80 es de 3,6 millones de euros, unos cuatro millones de dólares, sin personalización alguna, lo que la convierten en la Ferrari 0km de calle más cara de la historia. Sólo se fabricarán 799 unidades, desde fines de 2025 y hasta bien entrado 2027.

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