Desde hace décadas, el motor diésel fue el caballo de batalla de la industria automotriz, elogiado por su robustez, eficiencia y autonomía. No obstante, en los últimos años, las preocupaciones ambientales, aprovechadas por los políticos de turno (como siempre, “llevando agua para su molino”, respaldando a los grupos ambientalistas y otros) las leyes climáticas consecuentes y la irrupción de los eléctricos, arrinconaron a los diésel llevándolos hacia un estado de incertidumbre sobre su futuro (estará prohibido en la UE a partir de 2035).

El mecanismo impulsor que fuera otrora símbolo de rendimiento y durabilidad, y responsable del crecimiento de numerosas regiones en los lugares más recónditos del planeta, fue poco menos que marginado debido a su impacto en el medio ambiente. Sus emisiones de óxidos de nitrógeno (NOx) y partículas finas alentaron regulaciones más estrictas en todo el mundo, relegando al diésel a una posición cada vez menos protagónica en el mercado automotriz.

Con ciudades enteras imponiendo restricciones a la circulación de vehículos impulsados por motores ‘gasoleros’ y la percepción pública cambiando por opciones más limpias y sostenibles, no fueron pocos los que dieron por sentado el declive irremediable del diésel.

Sin embargo, en un giro sorprendente, y en China, donde la irrupción y auge de los eléctricos ha tomado más relevancia en la actualidad que en todo el mundo, la empresa local Weichai, llegó al escenario automotriz con una propuesta insospechada, un motor diésel que desafía todas las expectativas preestablecidas. Con una eficiencia energética nunca antes vista, esta innovación promete cambiar las reglas del juego y desafiar todos los relatos previos sobre el futuro del motor diésel, dándole una posibilidad de vida impensada hace poco tiempo atrás.

Lo concreto es que Weichai Power hace historia al presentar el primer motor diésel del mundo con una eficiencia térmica del 53,09 %, un récord mundial que ha sido oficialmente reconocido por prestigiosas organizaciones de pruebas internacionales como TÜV SÜD y el Centro de Investigación y Tecnología Automotriz de China.

Esto ha sido como un punto de inflexión en el largo camino que se inició en 2015, cuando Weichai Power formó un equipo de investigación dedicado a motores de alta eficiencia térmica, compuesto por cientos de jóvenes doctorados e ingenieros. Grupo que, trabajando en colaboración con destacados expertos nacionales e internacionales, así como con socios de investigación de la industria llevaron a cabo, a través de sucesivos pasos, desarrollos técnicos avanzados superando constantemente los límites propuestos hacia la optimización de los diésel.

En septiembre de 2020, Weichai Power logró un hito al presentar un motor diésel con una eficiencia térmica récord del 50,23 %. Desde entonces, la compañía ha seguido avanzado, aumentando la eficiencia térmica del motor al 51,09 % en enero de 2022. Y, más recientemente, en noviembre de 2022, superaron sus propios logros al alcanzar una eficiencia térmica impresionante del 52,28 %.

El equipo de investigación de Weichai Power, basándose en sus logros anteriores, dedicó más de 500 días de esfuerzo al desarrollo de aspectos críticos en los diésel, avanzando con éxito en tecnologías como combustión de alta expansión, presurización de flujo mixto, inyección de combustible más eficiente y reducción de fricción.

Los avances no fueron a través de grandes pasos, a menudo las ganancias fueron del orden del 0,1 %, aunque la sumatoria constante llevó a romper la barrera del 53 % de eficiencia térmica por primera vez a nivel mundial. Proceso durante el cual, el equipo obtuvo 176 patentes de invención entre otros hitos.

Según algunas estimaciones surgidas luego del récord, el aumento de la eficiencia térmica del 45/46 % al 53 % en los diésel puede acotar el costo económico de los mismos en un 14 % en China, lo que se traduce en un ahorro anual de, aproximadamente, 31 millones de toneladas de combustible y una reducción de emisiones de carbono de alrededor de 97 millones de toneladas.

Este avance no sólo beneficia al transporte, sino que también impacta en sectores como la construcción, la agricultura, la navegación y la generación de energía, contribuyendo al desarrollo económico y social mundial.

Que la industria del motor, en este caso Weichai Power, siga mejorando la eficiencia de los diésel merece un gran reconocimiento. Sin embargo, el impacto de este motor en la industria automotriz va a ser bastante limitado, debido a distintos factores. En particular, el hecho de que muchas marcas automotrices han reducido o abandonado por completo el desarrollo de vehículos diésel debido a escándalos de emisiones (atento VW!!), preocupaciones ambientales y regulaciones más estrictas para las emisiones de los diésel. Por otro lado, la transición hacia los eléctricos, aunque por momentos tambaleante, sigue avanzando.

De todas maneras, y a pesar de la tendencia general, el motor diésel de alta eficiencia de Weichai podría tener un segmento de mercado en gestiones específicas, como camiones pesados, maquinaria agrícola y aplicaciones marinas. Espacio que alentaría, no sólo a la marca china, sino a otros fabricantes/especialistas en motores diésel a continuar un desarrollo que, no hace mucho, se consideraba poco menos que rumbo a su extinción.

Fuente: Motor.es

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