Luca de Meo, declaró que no sería realista esperar que los vehículos eléctricos vayan a ser más baratos que los de combustión antes de 2035. Es más, anticipó que los EV seguirán siendo más caros durante décadas…

El CEO del Grupo Renault y también presidente de ACEA, la Asociación de Constructores Europeos de Automóviles, afirmó en varias ocasiones que apoya la prohibición de los 0Km de combustión en 2035, aunque advirtiendo a los usuarios sobre lo que deben esperar con respecto al futuro eléctrico.

Afirmaciones muy contundentes y que destacan la particular transición que preocupa, y mucho, a una buena parte de los automovilistas.

Los comentarios de de Meo fueron realizados en una charla pública mantenida con el presidente de Euroelectric y consejero delegado de la compañía eléctrica alemana E.ON, Leonhard Birnbaum. En la misma, el CEO del Grupo Renault recalcó aspectos básicos y filosóficos del negocio automotriz.

“Si no ganamos dinero con los eléctricos, va a ser una estrategia de ‘piernas muy cortas’. Hay que aceptar que tenemos que tener márgenes, no hacemos caridad”, afirmó en clara alusión a las manipulaciones de la clase política, a quienes les adjudicó que “están vendiendo una historia que no es real”. Es más, el ejecutivo puntualizó que, "intentar hacer en 10 años que los eléctricos sean más baratos que los de combustión, con los que hemos trabajado durante 150 años, es una ilusión que sólo pueden tener los políticos”.

De Meo considera que la tecnología eléctrica necesita aún mucho desarrollo para poder reducir sus costos de forma considerable, pero esto –siempre según el directivo- únicamente ocurrirá tras décadas de desarrollo tecnológico. Razón por la cual, y a pesar de lo que afirman algunos estudios, cuando llegue la prohibición de vender nuevos vehículos de combustión en 2035, los EV seguirán siendo más caros que estos.

Por otra parte, el directivo italiano afirmó que “las normas determinaron el tamaño y el peso de los vehículos en Europa en los últimos 20 años” (apuntando como responsables de dicho crecimiento a las normativas de seguridad), adjudicándole a esto el aumento de costos y emisiones ante la necesidad de utilizar mayor energía para el funcionamiento de los vehículos.

El presidente del Grupo Renault acentuó su crítica hacia la clase política, afirmando que, además, transmite mensajes contradictorios. Tomando como ejemplo el del ministro belga de Movilidad, Georges Gilkinet, que también intervino en el acto a través de un vídeo en diferido, donde este reclamaba a la industria automotriz vehículos con tecnologías más caras pero con precios más accesibles (NDLR ¡¿?!).

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