El icónico deportivo estadounidense está muy lejos de desaparecer, lo mismo que su ilustre “huésped” y con quien comparte en buena medida su leyenda, el motor V8.

La nueva generación del Ford Mustang está ampliando sus versiones con el paso del tiempo. Basado en la popular versión GT, propone una opción de alto rendimiento llamada Dark Horse e incluso con alternativas más extremas como el GT3 de competición y el próximo GTD. No obstante las variantes, sin embargo, todas tienen algo en común, su motor V8, precisamente, una configuración que ahora desmarca al Mustang como "gran sobreviviente" ante la desactivación de los Dodge Charger y Challenger, así como del Chevrolet Camaro, quienes se caracterizaban con similar impulsión nutriendo el singular nicho de los muscle-cars.

Un compromiso que se encargó de destacar el propio Jim Farley, CEO de Ford, "el Mustang celebrará su 60º aniversario este año. Muchos de nuestros competidores se han ido, han venido y se han vuelto a ir... Nosotros nunca hicimos eso. Siempre hemos estado ahí con el Mustang, que durante este tiempo ha cambiado, es cierto. Tenemos el EcoBoost, tenemos el Dark Horse ahora y vamos a seguir invirtiendo en distintas versiones. Y si somos los únicos en el planeta que fabricamos un auto deportivo V8 accesible para todos en el mundo, que así sea !”, recalcó Farley, comprometiendo al modelo, no sólo con la combustión interna, sino con la emblemática configuración Coyote V8/5.0 litros.

La apuesta de Ford por los pony cars V8 se produce pocas semanas después de que se anunciara la cancelación de los Camaro, Challenger y Charger en sus configuraciones con motores V8 de combustión. Y más allá de que tanto GM como Stellantis podrían reconsiderarlo, esto no quita que Farley haga hincapié que el Mustang fue realizado en torno a la misma idea (con motores V8), en el mismo segmento básico y con un rango de precios similar durante toda su historia a lo largo de seis décadas de producción. Y a partir de las palabras de Farley, todo indica que lo seguirá haciendo.

¿Por cuánto tiempo?, eso sería demasiado aventurado suponerlo. Lo más importante es que los amantes de los motores ICE en general y los V8 en especial –que en EE.UU. y en todo el mundo son muchos- han recibido las palabras de Farley como una de las mejores noticias del año que recién se inicia.

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