ALPINE A110, TAMBIÉN TENDRÁ SU “PIKES PEAK”
03/05/2023. Con 500 CV y sólo 950 kilos es el A110 más bestial hasta la fecha, cuyo desafío será subir en tiempo récord la trepada más famosa del mundo y mirando de reojo el mercado de EE.UU...
El próximo 25 de junio, en la famosa subida a Pikes Peak, Alpine se enfrentará un nuevo desafío que sumará kilates deportivos a los obtenidos en F1, resistencia y rally.
Para la ocasión, la marca de Renault alistará un Alpine A110 GT4 Evo preparado por el especialista francés Signatech, que también está a cargo de los prototipos LMP2 de la marca que participan en el WEC. A cargo de la conducción estará Raphaël Astier, ganador de la Copa FIA R-GT 2022 con el A110 Rally y que cuenta ya con cuatro participaciones en la trepada de Pikes Peak.
El Alpine A110 Pikes Peak by Signatech fue transformado en una auténtico auto de competición con un importante paquete aerodinámico.
En la zona frontal, se agregó una gran toma de aire y un enorme plano alar en la parte baja del paragolpes, complementado con unos generosos splitters que se “funden” con la carrocería.
Atrás, se destaca la presencia una aleta dorsal central que surge de una toma dinámica sobre el techo (al estilo de los autos de Le Mans), un gran alerón de dos secciones y un difusor inferior, que contribuirán a generar la máxima carga aerodinámica en las 156 curvas de esta trepada “hacia las nubes”. Expresión literal, ya que el desafío propone ascender durante casi 20 kilómetros, y desde los 2.800 metros hasta la llegada a 4,3 kilómetros de altura.
Con 950 kilos de peso, este singular A110, tendrá una relación peso/potencia de tan sólo 1,9 kg/CV, y para la ocasión lucirá una decoración muy especial. Haciéndole los honores al país anfitrión y a su propio país de origen, presentará colores azul, blanco y rojo, comunes a las banderas francesa y estadounidense, con el agregado de las 50 estrellas correspondientes a los estados de EE.UU. que aparecen en su estandarte nacional.
El Alpine A110 Pikes Peak participará en la categoría Time Attack 1, con la firme ambición de obtener el récord de su clase. Las primeras pruebas del vehículo ya han sido efectuadas en el circuito de Lurcy-Lévis y continuarán en tramos cerrados de montaña, en los Alpes franceses, donde afrontará retos similares a los que tendrá en la trepada americana, como supone ser la altitud con sus desafíos en temperatura y densidad del aire. Esta “aproximación” a las condiciones reales de la prueba deben solucionarse antes de llegar a Pikes Peak, donde finalizarán los ensayos y los entrenamientos previos a la presentación, el próximo 25 de junio.
Alpine se enfrenta por primera vez a Pikes Peak, pero podría ser el principio de algo mucho más difícil: vender los nuevos y futuros Alpine en EE.UU. Algo que se desprende de la intención de Luca de Meo, CEO de Renault, quien manifestó más de una vez su idea de llevar Alpine al mercado estadounidense y cuyo desembarco estaría previsto a partir de 2026, usando la red comercial de Auto Nation. Sólo así se entiende este desafío, ya que no es habitual que una marca que no tiene presencia en el mercado estadounidense participe en Pikes Peak, pues el impacto mediático de la carrera en Europa es relativamente limitado.
En el pasado, Peugeot participó en Pikes Peak en 1986 con un Peugeot 205 T16 que Ari Vatanen llevó a la victoria, logro que marca y piloto repitieron en 1988 con el 405 T16 de rally raid. Peugeot volvería en 2013 con el 208 T16 "Pikes Peak" en homenaje a sus dos anteriores triunfos y logrando un nuevo halago con Sebastien Loeb. Sin embargo, sus victorias no tuvieron más que ese correlato en Europa, ya que luego de intentarlo por varios años, la marca abandonó sus aspiraciones comerciales en EE.UU. a principios de los ’90.