El futuro del Mazda MX-5 parece asegurado de por vida. Un alto cargo de la división de la marca japonesa en Europa lo anticipó a través de sugestivas declaraciones, confirmando que este atractivo e icónico modelo no abandonará su propuesta deportiva, pero que tendrá que ceder en cuestiones técnicas.

Uno de los mayores desafíos que deberá afrontar el Miata será cuando, en 2026, se implemente la nueva norma de emisiones Euro 7, que condicionará todavía más a los motores de combustión interna como el que impulsa al modelo.

Una exigente normativa que, junto al cambio de movilidad previsto para 2035, también tendrá otras consecuencias, como la desaparición de determinadas carrocerías no aptas para la tecnología actual de propulsión eléctrica. Esto hizo que marcas que aún sostenían el estandarte de los deportivos en alto, comiencen a dar señales de como los afectará: mientras que BMW adelantó que su Z4 no tendrá relevo, Porsche apostó por transformar al 718 Boxster en un roadster deportivo 100% eléctrico. Esta última será la estrategia adoptada por Mazda para el futuro del MX-5.

Martijn ten Brink, consejero delegado de Mazda Europa, fue muy elocuente, despejando todos los rumores que circulan en torno al futuro del modelo: “el Mazda MX-5 no morirá nunca”. Frase consecuente con una exitosa historia que ya lleva más de tres décadas y que anticipa la llegada de una 5ª generación del modelo a principios de 2024.  Sin embargo, el futuro del MX-5 al cabo de su ciclo de vida a principios de la próxima década, era una verdadera incógnita. La marca de Hiroshima debía elegir entre despedirse de un superviviente o transformarse en un modelo eléctrico, algo que quedó claro  tras las declaraciones de ten Brink, cuando refirió al hecho de que el Mazda MX-5 tiene que ceder en cuestiones técnicas, o sea encaminarse hacia la electrificación.

La frase clave del ejecutivo fue, “creo que el MX-5 seguirá existiendo para siempre, aunque tendrá que ponerse al día. Este será un gran desafío para la gente de Mazda, que siente gran pasión por este auto. Así que somos curiosos y estamos ansiosos al respecto, pero esto no impedirá que el modelo siga siendo parte del portfolio de la marca”. Las palabras de ten Brink son bastante reveladoras, confirmando que el Mazda Vision Study presentado a finales del pasado año será una pieza clave en el futuro del roadster eléctrico en el que podría convertirse.

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