En 1958 no le permitieron competir en el GP de Francia en el velocísimo Reims-Gueux (última carrera de Fangio en F1 quien, según De Filippis, alguna vez le aconsejó, “Vas demasiado rápido, tomas demasiados riesgos”) ya que, según el director de la prueba, "El único casco que una mujer debe usar es el de la peluquería”.

Estereotipo inimaginable en estos tiempos, pero habitual en los ’50, cuando María luchó contra esa percepción tratando de correr en la que comenzaba a percibirse como máxima categoría mundial de automovilismo, nada menos...

Una historia breve, que tuvo sólo cinco participaciones en F1, siempre con Maserati, lo que con el paso del tiempo, le forjó una estrecha relación con la marca que representó. Vínculo que hasta la llevó a estar entre los fundadores del Club Maserati en 2004 y del cual fue su presidenta. Cuando falleció, en 2016 y con casi 90 años, De Filippis y Maserati, ya eran casi sinónimos...

María Teresa llegó a la F1 ocho años después del inicio del Campeonato Mundial de Pilotos en 1950, en la primera temporada en que se decidió coronar a la marca ganadora del Trofeo de Constructores, y se convirtió en la primera mujer en competir en una carrera de F1 cuando se clasificó para el GP de Bélgica -en el que finalizó 10ª- sobre una 250F similar a la que condujera Fangio cuando logró su 5º y último título mundial un año antes. Previamente, compitió en la Targa Florio de 1955 en una A6GCS “biposto” compartida con Luigi Belluci, terminando 9ª en la general y 4ª en la clase de 2.0 litros.

  La edición especial Maserati Ghibli F Tributo 2023 y la edición especial Levante F Tributo homenajean a De Filippis con argumentos distintivos. Detalles de diseño únicos, incluido un color exterior naranja saturado llamado Arancio Devil que se inspiró en el apodo de De Filippis, "La Diabla", aunque  están disponibles en un segundo color específico del modelo, Grigio Lamiera (Gris Lámina), una directa referencia a los paneles de metal (láminas) habituales en los autos.

Las ediciones especiales calzan llantas de 21”, con diferentes diseños para las versiones Ghibli F Tributo y Levante F Tributo. Los autos anaranjados tienen detalles en las llantas y distintivos en azul cobalto; elementos que tienen terminación naranja en los que lucen pintados de gris. Los interiores presentan costuras en contraste azul cobalto y naranja con tapicería de cuero negro o marrón,  de acuerdo con el color externo de la unidad.

Las ediciones especiales de Levante y Ghibli no solo honran a una pionera entre las mujeres en los deportes mecánicos, sino que también recuerdan la herencia en competición de Maserati y su decisión de avalar a una mujer en tiempos en que esto era poco menos que una utopía. Razón por la cual, así como se asocia el género a “una Ferrari” cuando se piensa en “la macchina” más famosa del mundo en automovilismo, el vínculo también le cabe a “una Maserati”, leyenda mecánica que, además, supo tener inspiración femenina...

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