El campeón de FIAT en su país de origen sufrirá una transformación dramática. La nueva generación llegará en 2024 y tendrá una muy estrecha relación a nivel técnico con el nuevo Citroën C3. Se producirá en Serbia y, no obstante su enfoque global, en Europa solo se comercializará en versión 100% eléctrica.

A pesar de ser un auténtico veterano, el cambio generacional del Panda aún se vislumbra lejano, sobre todo, porque el modelo de FIAT sigue cosechando extraordinarias cifras de ventas y se mantiene en el competitivo mercado europeo –especialmente, en Italia, donde es líder- como uno de los referentes de su segmento. De todas formas, y a pesar de los planes de la compañía para mantenerlo en producción hasta el año 2026, es necesaria una renovación integral, que se podría producir en un contexto que, a partir de la electrificación, se ha dinamizado como pocas veces antes.

La marca  sigue trabajando integrada al ambicioso plan estratégico que se puso en marcha una vez se materializó la creación de Stellantis. Y aunque en estos momentos la prioridad es mejorar las ventas del nuevo FIAT 500 eléctrico, la automotriz italiana está ultimando los detalles para el inicio del proyecto de cambio generacional del Panda.

El modelo actual es fabricado en las instalaciones de Stellantis en Pomigliano d’Arco (Italia), mientras que el proceso de producción en serie del nuevo se llevará a cabo en Kragujevac (Serbia), planta donde se fabricaba el desaparecido FIAT 500L, que recibirá una inversión de casi 200 millones de euros para su adaptación a la nueva silueta y modernización. De esta forma, la llegada del nuevo Panda marcará el reingreso de FIAT al segmento B en el Viejo Continente, escenario que abandonó cuando el Punto se dejó de comercializar.

El proceso de diseño del nuevo Panda está liderado por François Albine, ex diseñador del Grupo Renault que fue clave en la creación del nuevo e inminente Renault 5 eléctrico y que, según las últimas noticias, se apartará del Concept Centoventi, cuya versión de serie se proponía como la fuente inspiradora del nuevo Panda.

Más allá del estilo que pueda tener el nuevo Panda, lo que definirá su campo de acción será su mecánica, ya que tendrá diversos objetivos: además de Europa, donde será exclusivamente eléctrico, también se comercializará globalmente, especialmente, en la región Mercosur de Sudamérica, donde tendría producción brasileña, estaría impulsado por el nuevo IL3/1.0 litros de 120 CV y, en grado menor, por la versión eléctrica.

Tal como el nuevo Citroën C3 estará basado en la plataforma CMP, una arquitectura que, además de mantener contenidos los costos, hará posible su electrificación. El nuevo Panda eléctrico será comercializado en un primer momento con motor de 60 kW (82 CV) y una batería Svolt de 40 kWh. Más adelante, se incorporará a la gama una versión de 80 kW (109 CV) y batería de 50 kWh, con la que mejorará prestaciones y autonomía.

La producción del nuevo Panda se iniciaría en noviembre de 2024, cuando también debutaría en público como modelo 2025.

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