Días atrás, el nuevo presidente de Ford para América Latina, Daniel Justo, confirmó hoy que la nueva pick up Maverick llegará al Mercosur en el 2022, de lo que se desprende que, más temprano que tarde, aterrizará en Argentina, verdadero “paraíso de pick ups” en los tiempos que corren.

“Creo que la Maverick tendrá un público muy interesado en su tecnología, en sus dimensiones y en la versatilidad para el manejo diario. Ya hicimos pruebas en nuestra región y en todo el mundo, donde los clientes quedaron muy impresionados por la capacidad del producto”, destacó el ejecutivo en ocasión del anuncio.

La Maverick es una chata compacta que, como adelantamos, se posicionará por debajo de la Ranger y con la que la marca busca intervenir en una franja del segmento pick up donde, hasta la llegada de la Maverick, brillaba por su ausencia ya que, en su momento y especialmente en la región, solo contaba con la F-100/150  y, luego de un gran salto, ofrecía la pequeña Courier. La llegada de la Ranger y su producción argentina ocupó el amplio espacio que mediaba entre una y otra, sin embargo, como también anticipábamos, la especialización de los mercados provocó la apertura de nuevos nichos, como el de las pick ups compactas, que tiene en la Fiat Toro a su representante más cabal.

Apuntada a la Hyundai Santa Cruz y a la probable Chevrolet Montana en EE.UU, la Maverick tiene como objetivo regional a la exitosa pick-up de Fiat, para lo cual propone una estructura monocasco y algunas de las mecánicas  del Ford Bronco Sport, de hecho, se produce “codo a codo” con este SUV en México.

No obstante, respecto a la Toro, la Maverick es algo más grande y, por ejemplo, tomando como base el largo total, mientras que la chata de Fiat mide 4.915 mm, la de Ford llega a 5.070 mm, esto es alrededor de 115 mm más larga. Si tenemos en cuenta que la Ranger tiene una longitud de 5.354 mm (+284 mm que su pariente), podríamos  llegar a la conclusión de que la Maverick está “casi a medio camino” entre Toro y Ranger. Esto si bien en algunos aspectos la pone en ventaja respecto a la pick up de Fiat, podría “incomodar” a su hermana de marca, especialmente, en mercados no tan especializados, donde son otros los factores externos los que a menudo condicionan las ventas.

Claro que “donde las dan las toman” y también son otros los factores que podrían determinar que, un enfrentamiento real Maverick vs. Ranger, termine siendo simplemente un amague: capacidad de carga (casi 700 kilos vs. alrededor de 1.000), capacidad de arrastre (900 vs. 1.600 kilos), motorizaciones (nafteras e/190 y 250 CV vs. naftera y tdi e/166 y 200 CV), etc.

No obstante, el rubro que probablemente sea determinante para evitar el probable “canibalismo” que sugerimos en este informe será, sin dudas, el precio.

Por llegar importada desde México y ser un vehículo calificado como “comercial de carga”, la Maverick desembarcará en Argentina con 0% de arancel aduanero y estará exenta de impuestos internos, lo que le brindaría la posibilidad definitiva de despegarse de la “canibalización” sugerida, aunque... ¿esto le alcanzará para “cuatrerear” a la Toro?

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