Era cuestión de tiempo que el máximo responsable de Audi, o alguna de las fuentes autorizadas de la marca confirmara oficialmente lo que ya casi se daba por hecho en círculos bien informados. El Audi A1 será una nueva víctima de las estrictas normativas de emisiones que se avecinan, lo que podría suceder alrededor de 2025.

A principios de 2021 el futuro del Audi A1 se avizoraba bastante complicado, previéndose una salida de producción por más que los responsables de la marca dijeran que su futuro “sólo se está discutiendo”, una decisión que abría ciertas expectativas sobre una probable actualización de media vida como paso inminente para la continuidad del modelo.

Sin embargo, los últimos acontecimientos y declaraciones respecto a la dirección de la marca hacia un futuro electrificado pusieron a la silueta más vulnerable en la mira, el Audi A1 fue el primero de los señalados y el primero en caer. El propio CEO de la marca, Markus Duesmann, dejó entreverlo a principios de año, confirmándolo días atrás en una entrevista en Europe Autonews.

Entre diferentes cuestiones planteadas en la entrevista, especialmente por el futuro generacional del A1 y también del compacto A3, Duesmann amplió, “mucho dependerá del objetivo final de la norma Euro 7. Sabemos que ofrecer motores de combustión en los segmentos más pequeños en el futuro será bastante difícil porque los costos aumentarán. Por tanto, no tendremos sucesor del A1”.

Por otra parte, Audi ya ha confirmado que todo nuevo modelo que se lance al mercado a partir de 2026 será eléctrico, por lo que cabe esperar que el futuro del A3, sobre el que Duesmann no hizo referencia, esté contemplado en la nueva estrategia de movilidad sostenible. A pesar de que la marca también ha señalado que no habrá ningún eléctrico por debajo del segmento del Q4 e-tron, lo cierto es que el fabricante ha confirmado la presencia del Audi Urban Sphere en el Salón de Münich 2021, estrategia que convertiría al Audi Q2, uno de los tantos que se transformará en eléctrico, en el modelo de acceso a la gama de Audi.

La anunciada desaparición del A1 supone que la marca abandonará el espacio de los utilitarios Premium, un segmento que Audi abrazó desde hace más de 10 años, cuando la silueta A1 fue una realidad. Y este “tiro de gracia” que el marketing de la marca justificará ahora, no será menor que la “entronización” con que lo glorificó en 2010.

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