Al igual que otros mercados, China tiene un sistema de crédito diseñado para alentar a los fabricantes de vehículos a producir unidades más eficientes cualquiera sea su sistema de impulsión (motores térmicos, híbridos o eléctricos). De esta manera, los fabricantes automotrices reciben “créditos verdes” que pueden utilizar para compensar los “créditos negativos” de vehículos más contaminantes que produzcan. Las empresas automotrices también pueden comprar créditos verdes para cumplir con las normas de emisiones vigentes en distintos escenarios y eso es lo que ha hecho FAW-VW en China.

Las fuentes no aclararon cuántos créditos verdes FAW-VW está comprando a Tesla, pero algunos comentarios sugieren que la compañía germano-china los comprará por aproximadamente 3.000 yuanes (u$s 457) cada uno. Ninguna de las partes integrantes de la empresa hizo comentarios  sobre el acuerdo, limitándose a afirmar que la compañía está "apuntando estratégicamente a cumplir con las normas vigentes de China".

Al respecto, Reuters informó que en 2019, FAW-VW y SAIC VW se encontraban entre los fabricantes automotrices que más créditos negativos generaban en el país.

A lo largo de 2020, VW aumentó significativamente su gama de vehículos eléctricos en China y continuará haciéndolo este año, ya que planea introducir no menos de cinco modelos eléctricos de la gama ID a través de sus diversas empresas conjuntas locales.

Tesla, cuya producción de vehículos es íntegramente eléctrica, vende créditos regulatorios a fabricantes rivales en los EE.UU. año tras año, alcanzando ganancias por u$s 3.300 millones a través de dicha venta durante los últimos tres años, de los cuales u$s 1.600 millones fueron obtenidos solo en 2020.

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