Bentley introdujo por primera vez el motor W12/6.0 litros a su línea de modelos en 2003 y desde entonces ha aumentado su potencia nominal en un 27% y su par motor en un 38%, llevando la primera a más de 650 CV.

Las mejoras del motor se han producido luego de varias intervenciones. A lo largo de los 17 años de vigencia de la unidad, el cárter se ha reforzado en un 30%, las paredes de los cilindros se han revestido para reducir la fricción, los sistemas de refrigeración se han mejorado, incluyendo tres circuitos de refrigeración separados y mucho más.

Para asegurarse de que cada motor esté a la altura de uno de los modelos más exclusivos de la compañía, las unidades son construidas, armadas y examinadas a fondo.

Luego de un armado poco menos que digno de un quirófano, la prueba inicial contempla la verificación de pérdidas, presurizando los sistemas de agua, aceite y refrigerante, uno a la vez, para determinar qué tan rápido o lentamente la presión generada disminuye. En caso de fugas, Bentley luego usa un líquido especial para determinar el motivo y de dónde provienen las mismas.

La segunda es una prueba “en frío”. Se fija un motor eléctrico al cigüeñal y se hace girar el motor a 120 rpm durante un ciclo de prueba de 15 minutos. El resultado de esta operación “en cámara lenta”, permite medir 600 propiedades individuales de la unidad, con intención de descubrir anomalías menores eventuales que no serían detectables si el motor estuviera en funcionamiento.

Luego, finalmente, viene el “Hot Test”, que simula el uso del mundo real. Cargando un líquido ultravioleta en el motor, se lo enciende y se lo hace funcionar a velocidad de ralentí (regulando) mientras los técnicos analizan  su sonido y detalles menores y pasan una luz ultravioleta sobre él para verificar si hay otro tipo de pérdidas.

La mayoría de los W12 solo tienen que pasar por una prueba de 21m30s, pero uno de cada cien motores se selecciona para una prueba de potencia completa que dura ocho horas. Mientras que la mayoría de los motores solo son testeados a 3.800 rpm, ese “uno de cien” es llevado hasta las 6.000 rpm.

Desde 2002, en Crewe se han producido más de 100.000 motores W12 y todos han debido superar este tipo de pruebas. Para el caso de las unidades destinadas al Bacalar, sin embargo, no llevará tanto tiempo ya que la exclusiva serie del deportivo solo estará limitada a 12 ejemplares.

No obstante, 45 artesanos intervienen durante seis horas y media para asegurar que cada motor reciba una atención Premium algo que, entre otras cosas, es por lo que cada cliente paga cada vez que elige un Bentley.

.............................................................................................................................................