A la noticia brindada por el CEO de la marca, Ralf Brandstatter, hace una semana atrás, y que replicamos en este espacio el 23/11, ahora se le suman claros indicativos de que la retirada del modelo incluiría al Viejo Continente, según fuentes familiarizadas con el plan de producto.

Como en el caso de Norteamérica, sería solo el sedán la versión que se discontinuaría para 2023 en Europa, dejando a cargo de la versión familiar la continuidad de la familia Passat, aunque no está claro si se trataría de la Variant, la Alltrack o ambas versiones.

Un dato sugestivo considerando  que el modelo lidera el segmento europeo de vehículos de turismo de tamaño mediano en términos de ventas, con un volumen de 88.478 unidades hasta octubre de 2020, con el competidor más cercano en el segmento, el Skoda Superb, también perteneciente al Grupo VW, que registró ventas de 47.889 unidades durante el mismo período.

Según Automotive News, VW tiene la intención de abandonar el estilo de carrocería sedán del Passat con el fin de "reducir la competencia interna", lo que sugiere que los ejecutivos del grupo apuntalarían al modelo de Skoda a partir de 2023.

Inicialmente planeado para fabricarse en Turquía, la próxima generación del Passat se fabricará en Eslovaquia en la planta de Bratislava, donde el Superb también se trasladará desde la planta checa de Kvasiny, confirmando la estrategia del grupo respecto a ambos modelos. La fábrica de Emden, Alemania, donde se produce actualmente el Passat, se adaptará exclusivamente para vehículos eléctricos en un futuro próximo.

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