Sus autos de F1 son híbridos, su hiperdeportivo LaFerrari es híbrida, y la SF90 Stradale fue el primer híbrido plug-in de producción que Ferrari lanzó en 2019, ocasión en que la marca manifestó que había “más híbridos en camino” y hasta una Ferrari totalmente eléctrica para 2030! Sin embargo, el CEO de la marca sentenció ayer que “Ferrari nunca se volverá completamente eléctrica”, lo que también podría cambiar a futuro, considerando la historia y sus actores...

La cita, a través del CEO de Ferrari, Louis Camillieri, con motivo de la publicación de resultados del tercer trimestre de Ferrari, fue un revelador “bocadillo” en la jornada bursátil, que se destacó por números que, considerando lo sucedido este año con la pandemia por el Covid-19, fueron más que alentadores para la legendaria marca de origen italiano.

La misma informó que sus ganancias se mantuvieron estables en el tercer trimestre mientras recupera la producción perdida por el cierre de su planta de producción durante siete semanas, en uno de los momentos más álgidos de la pandemia en Italia.

La compañía de Maranello, informó  que el beneficio neto fue de 171 millones euros en el trimestre julio-agosto-septiembre, en comparación con 169 millones de euros durante el mismo período del año pasado, mientras que las entregas  se redujeron en 161 unidades, para un total de 2.313 vehículos.

Los ingresos cayeron un 3% hasta los 888 millones de euros cuando, en el mismo período de 2019, habían llegado a  915 millones de euros. La contención de pérdidas graves estuvo motivada por las buenas ventas de los modelos de las ediciones especiales Monza SP1 y SP2, que continúan entregándose según lo programado, mientras que los ingresos por patrocinio, comerciales y de marca, también se vieron afectados por la pandemia y la cancelación resultante de algunas carreras de F1.

Volviendo a las declaraciones de Camillieri, el ejecutivo destacó que la electrificación total debería de proponer  ahorros de costos a largo plazo y a medida que mejoren las tecnologías de baterías. Sin embargo, “insistir con una Ferrari 100% eléctrica es empujar innecesariamente las cosas. Realmente, creo que no veré nunca una Ferrari  100% EV y ni siquiera al 50%, al menos, mientras yo viva”.

El ejecutivo tiene 65 años y es hasta lógico que se manifieste de esta forma, por lo que es de esperarse que en los próximos años todavía habrá un V12 de Maranello sonando por ahí, cuando el parque automotor del mundo solo produzca zumbidos.

Una cosa que sí parece segura es que Ferrari y otras marcas, especialmente las de deportivos y algunas especializadas, probablemente serán las últimas en proponer superdesarrollos para sus motores de combustión interna. Algo en lo que el CEO de la marca de Maranello se respaldó para decir, “me arriesgaré y diré que, en realidad, las Ferrari son hasta buenas para el medio ambiente porque sus propietarios las conducen muy poco!!", algo que, por más que no sea el mejor argumento de marketing para Ferrari en el futuro, no impide que la lista de espera por un auto de Maranello sea todavía muy larga y sus ganancias todavía muy alentadoras.

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