La historia, por reciente, no deja de tener su épica...
Era el verano europeo de 2016 cuando Stefan Pierer, CEO de KTM, anunció los planes de la marca de Mattighofen de competir en MotoGP en la siguiente temporada. KTM ya había obtenido éxitos en 125 cm3, 250 cm3 y Moto3, pero el desafío a la clase-reina sonó como “palabras mayores”.
Alguien le recordó a Pierer aquella famosa frase de un concesionario Ford, Bob Tasca, “ganar el domingo para vender el lunes”, sin embargo, la filosofía del ejecutivo iba más lejos que sólo vender más motos.
KTM ya vendía un 60% de motos de calle y ruta, y un 40% de motos para off-road, precisamente, las que le habían dado éxitos y fama hasta el momento (entre ellos, una seguidilla que llegó a 18 triunfos en el Dakar), pero Stefan Pierer quería algo más que ser la primera marca europea y la más exitosa en TodoTerreno.
Entre otras ambiciones, es sabido que el CEO de KTM tiene “entre ceja y ceja” a Honda, a la cual acusó hace algunos años de “hacer siempre lo que más le conviene y sin importarle el deporte”. Consiguió su revancha hasta este año en el Dakar, pero quería hacerlo también sobre el asfalto...
“Las carreras son nuestra filosofía, nuestra motivación, y si entramos en la categoría-reina seguro que nos costará, pero llegaremos al podio, y el sueño de mi vida es ser campeón del mundo de MotoGP”, se encargó de decirle a quien lo quisiera escuchar.
Y al parecer, el domingo pasado en Brno, República Checa, dio el primer paso...
El 9 de agosto de 2020 será recordado como el día en que MotoGP se puso completamente “patas para arriba”: poniendo en lo más alto a Sudáfrica de la mano de un excelso Brad Binder (hoy cumple 25 años); cuyo talento le permitió, en la que solo fue su tercera carrera en MotoGP, comenzar a darle forma al ambicioso proyecto de KTM, a la par que el suyo propio como piloto de GP.
Brad Binder es el 26º piloto en ganar en MotoGP y el 111º en la categoría-reina del motociclismo mundial de pista. En total, suma 16 victorias totales –Moto3, Moto2 y MotoGP-, lo que lo coloca en la 50ª posición entre los más vencedores, convertido en el segundo sudafricano en lograrlo (luego de Kork Ballington que ganó 31) y es el más ganador en KTM, con 16 victorias en las distintas categorías en que compitió con la marca.
Es el cuarto rookie que consigue una victoria en MotoGP, venciendo en su tercera carrera en la categoría para superar a Dani Pedrosa (ganó en su cuarta presentación), igualando a Jorge Lorenzo y solo por detrás de Marc Márquez (quien venció en su segunda participación).
Es la primera victoria para Sudáfrica en la categoría-reina, la primera para África en MotoGP, y Binder es el cuarto piloto africano en ganar en la máxima clase, tras los rodesianos Ray Amm, Gary Hocking y Jim Redman.
Brad Binder es el tercer piloto que gana en MotoGP tras hacerlo en Moto2 y Moto3, después de Maverick Viñales y Álex Rins; el primero en hacerlo con la misma marca en dichas categorías y el 18º en toda la historia que gana en tres categorías con la misma marca.
Volviendo a la primera victoria de KTM en MotoGP: es la 17ª marca que lo consigue y luego de más de 17 años de la anterior (Ducati en Catalunya 2003). Nunca había pasado tanto tiempo sin una nueva marca ganadora. Además, KTM, es la primera marca en ganar en las tres categorías actuales: Moto3, Moto2 y MotoGP, y es la primera marca no italiana ni japonesa en ganar desde König en 1973.
KTM ha logrado victorias en cinco categorías distintas (MotoGP, Moto2, Moto3, 125 y 250 cm3), superando las cuatro categorías en las que ganaron marcas como MV Agusta, Suzuki, Kawasaki, Derbi y Gilera; igualando las cinco de Yamaha y solo por detrás de las siete de Honda, sin duda, otro objetivo del obsesivo CEO de KTM.
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