Las primeras imágenes del nuevo Mini JCW GP destacan algunas sugestivas pautas de estilo, la mayoría de las cuales provienen directamente de un concepto que, en principio, pareció más cercano a un ensayo radical que heredero de una cierta tradición.
Sin embargo, la versión del nuevo vehículo no es tan extrema (por allí, se dijo que hasta era “escandalosa”) como el concepto, aunque es lo más cercano que se podría esperar.
Especialmente, por esos guardabarros abultados, que no son tan evidentes ni con forma de "cuchillo" como en el prototipo, aunque siguen siendo bastante impresionantes, tanto por su forma y misión como por su integración con el “babero” frontal. El gran alerón del techo también intimida. Tiene un aspecto fantástico y está directamente influenciado por el del concept.
Sin dudas, este no será “un Mini para todos los días”. En cambio, propondrá un monstruo caro, especial para la pista y con producción limitada.
Estará impulsado por un motor de cuatro cilindros, 2.0 litros, de más de 300 CV, lo que lo convertirá en el Mini más poderoso de la historia. Esta condición, con una suspensión más rígida, frenos optimizados y la aerodinámica descripta, debería bastarle a los 3.000 afortunados compradores a los cuales está destinado.

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