El Beetle se fabricó en la planta de Puebla desde 1998 y, el año pasado, durante el Salón de Ginebra, Frank Welsch, director de Investigación y Desarrollo de VW, confirmó que la generación actual de Beetle sería la última.
“El Beetle se lanzó en un momento en el que los vehículos con estilo retro se pusieron de moda. Fue un auto que en su momento tuvo mucho éxito. Pero como todo tiene un principio y un fin decidimos que ya era momento de decirle adiós”, manifestó Mauricio Gálvez, gerente de Relaciones Públicas de VW México.
Había razones para anticipar la despedida.
En los últimos años la demanda del modelo comenzó a caer dramáticamente. Según datos del Instituto Nacional de Geografía y Estadística, la producción de las distintas versiones del modelo pasó de casi 60.000 unidades en 2017 a 38.000 en 2018.
“El mercado está experimentando un cambio hacia los SUV. Hemos visto que este tipo de vehículos ha ido ganando terreno en diferentes segmentos”, amplió Gálvez. Y mientras los proveedores que participarán en la producción del Tharu en Puebla se preparan para arrancar en 2020 con el nuevo modelo, VW produce los últimos Beetle bajo el formato de la Final Edition anunciada.
Que tendrá techo corredizo panorámico con ajuste de altura, retrovisores con luces de guiño integradas, llantas de aleación de 18”, alerón y paragolpes deportivos.
En el interior, habrá un sistema de sonido Fender, pedales en aluminio, butacas delanteras calefaccionadas y tapizadas en tela bitono, iluminación ambiental con opción tricolor (rojo, blanco y azul), pantalla táctil de 6.5” y cámara de visión trasera.
Esta edición especial estará limitada a 565 unidades y todas llevarán el mismo motor naftero 5/2.5 litros de 170 CV, asociado a una caja A6 con tres modos de manejo.

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