La cancelación de siete mil puestos de trabajo aumentará en unos 5.900 millones de euros (u$s 6.700 millones) el ahorro anual de la marca principal del grupo VW para el año 2023.
El plan, anunciado días atrás, se conoció poco después de que el grupo alemán advirtiese que recortará empleos a medida que acelera el lanzamiento de vehículos eléctricos, que son menos complejos de fabricar y requieren una cantidad menor de operarios para tal función.
VW Group ha tenido durante años dificultades para aumentar la rentabilidad de su marca VW y las cifras de 2018 no hicieron más que corroborarlo: el año pasado, el margen operativo de la marca se redujo a 3.8%, mientras que varios de sus rivales obtuvieron márgenes que promediaron algo más del 8%.
VW descartó despidos obligatorios hasta 2025, pero amplió que la jubilación anticipada de personal que trabaja en puestos administrativos en la sede de la empresa en Wolfsburgo, ayudará a reducir la fuerza laboral entre cinco y siete mil puestos de trabajo.
El objetivo de 5.900 millones de euros para 2023 se suma a la meta de 2020 (para cuando se prevé un ahorro de 3.000 millones) manifestó la compañía, que planea convertirse en el mayor fabricante de autos eléctricos del mundo para 2025 aunque, previamente, la marca tiene como objetivo un margen de rentabilidad del 6% para 2022.

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