El nuevo sedan S60 de Volvo debutará en junio, se construirá en la nueva planta estadounidense de la marca (Charleston, Carolina del Sur) y estará disponible para el lanzamiento con una gama de motores nafteros de cuatro cilindros, así como dos versiones con tren de potencia híbrido plug-in manifestó la compañía hoy, adelantando que la versión híbrida suave del S60 (48 volts) debutará en 2019.
El anuncio se produce cuando Volvo acelera su cambio hacia trenes de potencia electrificados y lejos de los diesel que, no obstante, representaron casi el 80% de sus ventas en Europa el año pasado, según datos oficiales de la marca.
"Nuestro futuro es eléctrico y ya no desarrollaremos una nueva generación de motores diesel", manifestó el gerente general de Volvo, Hakan Samuelsson, en un comunicado. "Eliminaremos los vehículos solo impulsadas con motores de combustión interna, reemplazándolos con versiones nafteras híbridas a modo de transición a medida que avanzamos hacia la electrificación completa. El nuevo S60 representa el primer paso en ese sentido".
El año pasado, Volvo se comprometió ofrecer algún tipo de electrificación en cada modelo completamente nuevo que debute a partir de 2019.
Por su parte, el responsable de I + D de Volvo, Henrik Green, comentó que recién entre 2023 y 2025 la marca podrá eliminar gradualmente todos los modelos que funcionan exclusivamente con motores de combustión interna.
El mes pasado, la empresa definió un nuevo objetivo como parte de su estrategia de electrificación: quiere que los autos totalmente eléctricos representen la mitad de sus ventas globales para 2025.

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