El fabricante japonés trabaja intensamente en nuevos diseños de motores de combustión interna “tan eficientes como un eléctrico”, además de una nueva generación de unidades rotativas que alargarán la vida útil de los mismos.
Los rumores sobre el retorno de los motores rotativos habían comenzado hace ya varios meses y, finalmente, un directivo de la marca japonesa lo confirmó en forma oficial: los motores rotativos de Mazda volverán en 2019.
Martijn Ten Brink, vicepresidente de Ventas y Servicio al Cliente de Mazda para Europa, lo manifestó en declaraciones recientes a la prensa, revelando una serie de detalles que marcan el derrotero de la renovada alternativa para los próximos años.
No obstante, el ejecutivo confirmó que, paralelamente, Mazda está desarrollando un vehículo totalmente eléctrico también para el próximo año y si bien todavía no hay detalles precisos acerca de este nuevo modelo, el directivo adelantó que entre las opciones que conformarán su oferta habrá una variante con el nuevo motor Wankel en gestación.
Si bien la marca considera que este sistema no será necesario para la mayoría de los clientes, que solo cubren distancias menores a los 50-60 kilómetros diarios, una de las principales funciones del nuevo motor rotativo será ampliar este rango de acuerdo a las necesidades por recorrer mayor kilometraje.

Este nuevo motor rotativo será naturalmente aspirado y funcionará exclusivamente como un generador de energía para asistir al sistema de baterías cuando sea necesario.
Mazda asegura que se trata de una unidad de dimensiones reducidas, que estará situado en la parte inferior del vehículo, para bajar el centro de gravedad y no afectar el comportamiento dinámico de la unidad.
La perspectiva de la marca es bastante diferente a la del resto de otros fabricantes, ya que si bien apuesta por la electrificación como una nueva alternativa para sus clientes, considera que los motores térmicos tienen todavía un enorme potencial.
Mazda considera que los motores de combustión interna seguirán siendo utilizados por menos por otros 25 años, motivo por el cual está trabajando para mejorar la eficiencia de sus propios motores térmicos en alrededor de un notable 56%.
Se trata de los nuevos motores Skyactiv-3, un naftero que promete la misma eficiencia y emisiones que un motor eléctrico, si se cuenta todo el proceso desde la creación de la energía eléctrica, su distribución y su almacenamiento (algo muy tenido en cuenta y adelantado por el CEO de PSA, Carlos Tavares).

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