"Tenemos que ver si una feria como Detroit encaja con la cadencia de nuestro calendario de lanzamiento y si hay un formato más efectivo para nuestras necesidades", comentó un alto ejecutivo de Mercedes, adelantando una negativa en ciernes. Cosa que poco menos que confirmó cuando amplió, "La clase G fue el producto perfecto para debutar este año, pero la probabilidad de que estemos en Detroit el próximo enero es muy pequeña. Sin embargo, eso no significa que estemos descartando un regreso en 2020", admitió contemplativo.
El retiro de Mercedes-Benz marcaría un gran y último revés para el North American International Auto Show, que vio a marcas como Mazda, Volvo, Porsche, Jaguar y Land Rover retirarse, poniendo mayor atención en los costos y sopesando las mejores alternativas para los dólares de marketing invertidos.
La ausencia de Mercedes en el legendario Cobo Center de Detroit tendría un impacto muy significativo. Tradicionalmente, la marca alemana, ha ocupado el espacio más cercano a la entrada de mayor tránsito y ha complementado su conferencia de prensa en el piso de exhibición con presentaciones periféricas.
En la última edición, Mercedes improvisó un teatro histórico convertido en garaje en el centro de Detroit para dar a conocer el nuevo Clase G, imagen complementada con un fondo de llamas y con Arnold “Terminator” Schwarzenegger junto al CEO Dieter Zetsche como anfitriones en el escenario.
A través de los años, Zetsche siempre ha puesto en evidencia sus lazos emocionales con la ciudad, que se remontan a principios de la década del 2000, cuando lideró el antiguo Grupo Chrysler, por aquel entonces parte de Daimler.

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