El volumen de Maserati aumentó a 36.000 unidades, desde los 23.900 en los primeros tres trimestres del año ayudado por la disponibilidad total del Levante, sin embargo, la idea es crecer bastante más.
Según estimaciones oficiales, el nuevo SUV también ayudará a Maserati a elevar las ganancias anuales a 1.000 millones de euros.
El nuevo SUV utilizará la plataforma Giorgio tracción trasera/tracción total de Alfa Romeo (el Levante se basa en la berlina Ghibli), base también empleada en el SUV Stelvio que salió a la venta este año aunque, probablemente, su tren de impulsión sea único, señaló Marchionne.
Con un segundo SUV, Maserati ocuparía un lugar más fuerte frente a su rival Porsche, que amplió su línea de productos más allá de los autos deportivos de lujo tradicionales, incorporando el Macan como una alternativa más pequeña al Cayenne, ya que sus clientes en los principales mercados exigen cada vez más SUV y crossovers.
El nuevo SUV compacto Maserati también sería un rival, aunque de mayor precio, respecto a BMW X3, Audi Q5 y Jaguar F-Pace.
En el tercer trimestre del año, las ganancias de Maserati subieron un 10% a 113 millones de euros debido a que los mayores envíos del Levante contrarrestaron en gran medida los menores volúmenes del sedán Quattroporte, según puntualizó FCA en su informe de ganancias del tercer trimestre.
Los ingresos netos cayeron un 6% a 821 millones de euros, principalmente, debido a divisas negativas y menores ventas en China.
Durante el contacto con los analistas, Marchionne confirmó que Maserati ha estado desacelerando la producción del Levante para "alinear la producción con la demanda del mercado".
Sin embargo, el jefe de finanzas de FCA, Richard Palmer, dijo que la compañía espera un fuerte cuarto trimestre para Maserati, especialmente en América del Norte.

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