La empresa ofrecerá diversas alternativas para minimizar los alcances de la desvinculación a los afectados, como jubilación anticipada voluntaria y paquetes especiales a unos 1.400 trabajadores en las dos regiones combinadas, recortes que se producirán desde finales de septiembre (los detalles de los mismos se conocerán en junio).
La compañía manifestó que dos tercios de las ofertas se harán en América del Norte, a pesar de que no se conoce cual será el nivel de aceptación de cada caso en particular.
Ford declaró que casi todos sus equipos de trabajo se verán afectados, excepto, desarrollo de productos y producción, Ford Credit, informática y datos y análisis globales.
Un portavoz de la marca comentó que las reducciones afectarán, especialmente, a personal de otras áreas incluyendo, finanzas, legales, recursos humanos, comunicaciones, gobierno, marketing, ventas y departamentos de servicios.
"Seguimos centrados en las tres prioridades estratégicas que puedan aportar valor e impulsar el crecimiento rentable que incluyen, la fortificación de los pilares de ganancias en nuestro negocio principal, la transformación de las zonas tradicionalmente de bajo rendimiento e invirtiendo de forma agresiva, pero con prudencia, en las oportunidades emergentes", manifestó la marca en un comunicado.
El director financiero Bob Shanks dijo que la compañía busca ahorrar cerca de u$s 3.000 millones por año cada uno de los próximos tres años a medida que aumentan los costos. En cuanto a las características de las “eficiencias” pretendidas, vendrían del lado de materiales, proveedores y gastos generales de fabricación.
En principio, los recortes no se aplicarán a las divisiones de Europa y América del Sur, ya que en el primero de los casos, se han recortado cientos de asalariados y empleados como parte de su plan de reestructuración, lo que le ha permitido obtener beneficios en los últimos dos años. Y lo propio sirve para Sudamérica, donde también se produjo una reducción de los puestos de trabajo. Medio Oriente y África no se verán afectados porque se trata de nuevas unidades de negocio en ámbitos emergentes.
En otro orden, la semana pasada, el CEO Mark Fields, se enfrentó a preguntas de la junta directiva de la compañía acerca de su estrategia para la empresa.
Los accionistas se quejaron del precio de las acciones y preguntaron por qué Ford estaba invirtiendo en el futuro afectando las ganancias de hoy.
Desde que Fields se convirtió en CEO de la marca en 2014, el precio de las acciones de Ford han caído casi un 40%.

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