Luego de no pocas discusiones internas y varios cambios de rumbo, el proyecto DSG/A10 “está muerto”, según comunicó Friedrich Eichler, máximo responsable de la división Trenes de Potencia de VW, en el marco del Simposio Internacional del Motor en Viena celebrado fines de abril.
"Hace dos meses, finalmente, el prototipo fue abandonado", manifestó Eichler, cancelando uno de los proyectos más ambiciosos en materia de transmisiones que el grupo VW haya encarado hasta el momento.
El ambicioso concepto fue anunciado en la edición 2013 del mismo Simposio de Viena, por el CEO de VW de entonces, Martin Winterkorn, y su intención era rivalizar con General Motors y Ford Motor, que ese mismo año anunciaron sus planes para formar un equipo de trabajo que desarrollaría transmisiones automáticas de nueve y 10 velocidades, no solo para sus propios vehículos, sino con intención de comercializarlas a distintos clientes del ámbito automotriz.

En aquel momento, Winterkorn alabó, "una transmisión con un rango extremadamente amplio, que permitirá reducir las rpm y otras mejoras relacionadas con la performance y los consumos de nuestros vehículos”, sin hacer alusión a su eventual venta a otras marcas o grupos.
La transmisión A10 fue pensada para ser acoplada a propulsores de alto par motor y, considerando que en ese aspecto los diésel marchan a la cabeza, no sería descabellado suponer que el engaño de VW con las emisiones de esos motores no haya contribuido a su definitiva cancelación.
Eichler manifestó que la caja de cambios de 10 velocidades representó uno de mayores “enfoques de ingeniería del pasado inmediato de VW”. Motivo por el cual, si bien el proyecto fue retirado de la mesa de desarrollo, no se descarta su retorno algún día y bajo otras circunstancias.
Así lo dejó entrever el ejecutivo, con un elocuente, "todos los datos han sido bien guardados".

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