Varios golpes de escena -algunos, impensados-, comenzaron a preparar el terreno para que el GP de España, quinta carrera del calendario 2016 de F1, se transformara en una jornada histórica, inolvidable para memoriosos y estadistas, pero sobretodo, para Max Verstappen, de ahora en más, el ganador más joven en la historia de la F.1, un record que, como los números de Juan Manuel Fangio, será poco menos que imposible de batir (a partir de su llegada a la F1 con 17 años, se elevó a 18 la edad mínima para correr en la categoría).
Hechos fundamentales que coincidieron para que el joven Max escribiera esta página histórica…
En primer lugar, el enroque que mandó a Daniil Kvyat a Toro Rosso (algo así como el equipo “B” del grupo) incorporando a Verstappen al team principal, Red Bull, a partir de lo cual, para nadie era sorpresa, que sus posibilidades iban a mejorar.
Como consecuencia de esto, realizó un magnífico trabajo en clasificación, postergado por apenas 0.407 por su nuevo coequipier, el mucho más afiatado Daniel Ricciardo. Sin embargo, con su cuarto lugar y a expensas de un pobre rendimiento del equipo más importante de la F1, postergó a ambas Ferrari, despegándose de aquellos con quienes se tuteaba en la grilla carrera tras carrera, los Williams, los Force India y hasta su propio compañero de equipo en Toro Rosso, Carlos Sainz Jr.

También obró en su favor, de manera más determinante, la brevísima carrera que tuvieron los Mercedes que, luego de lograr un nuevo 1-2 en clasificación, esta vez con Hamilton sobre Rosberg, tuvieron un inadmisible choque donde el campeón impactó desde atrás a su compañero, luego de sendos errores y no pocas ansiedades (Hamilton volvió a largar más lento, fue superado por Rosberg e intentaba recobrar la punta frente al alemán, que debió modificar sobre la marcha el mapeo electrónico de su motor porque “se quedó sin potencia”, aunque no fue lo suficientemente rápido…). Concretando, el férreo dominio de los inaccesibles Mercedes, de pronto, desapareció, liberando la carrera a su propia suerte.
Ricciardo quedó como líder y Verstappen en la antesala de la historia…
Atrás de ellos, unas recuperadas Ferrari, intercambiaban el nombre de sus protagonistas, ahora con Vettel-Raikkonen y a la caza de ambos Red Bull.
De esta forma se generó una de las carreras más interesantes de la categoría desde el punto de vista del espectáculo, aunque los protagonistas le entregaron una cuota de deportividad rayana con lo excelso.
Y aquí entraron a validarse las estrategias de neumáticos de cada uno. Ferrari hizo la primera jugada, adelantando la parada de Vettel, para llevar a tres detenciones la carrera del alemán, aunque con un formato más agresivo. Lo imitó Red Bull con Ricciardo.

No obstante, ambos equipos tenían sus reservas con Verstappen y Raikkonen que, finalmente, hicieron rendir como nunca a sus gomas ‘medias’, fueron a solo dos detenciones por caucho y dirimieron la carrera a gran nivel.
El joven holandés contuvo en todo momento a Raikkonen, quien intentó el sobrepaso varias veces con DRS a pleno (lo que indica a las claras que estaba a menos de un segundo), sin embargo, nunca tuvo la oportunidad concreta de doblegarlo, algo que si intentó Ricciardo con Vettel y que estuvo a punto de encontronazo.
La verdadera idea de cuales eran los términos en que se debatía la carrera es que, a diez giros del final, los cuatro primeros estaban encerrados en menos de seis segundos.
En estas condiciones, afloraron varias de las virtudes que muchos advirtieron tempranamente en Verstappen.
A su velocidad proverbial, le sumó su rápida adaptación a un nuevo auto (entre otras, cambió un auto con motor Ferrari por otro con un Renault-TAG Heuer), pero, sobretodo, resistió a la presión, sin cometer el más mínimo error, que le puso uno de los pilotos con más ritmo y mejor gestión de neumáticos de la F.1, el excampeón mundial Kimi Raikkonen.
Esa cuota imprescindible que, generalmente, define a un buen piloto de un ganador, estuvo a cargo, pura y exclusivamente, de Max Verstappen, consagrado e histórico vencedor de su primer carrera de F1 con poco más de 18 años y medio, casi como para asegurar que todos los que, quizás audazmente, aseguraban que tendría ‘destino de estrella’, esta vez, tuvieron razón.

Clasificación Final

Promedio del Vencedor: 181,241 km/h

Campeonato Mundial de Pilotos

1. Nico Rosberg (100 puntos)
2. Kimi Raikkonen (61)
3. Lewis Hamilton (57)
4. Sebastián Vettel (48)
5. Daniel Ricciardo (48)
6. Max Verstappen (38)
7. Felipe Massa (36)
8. Valtteri Bottas (29)
9. Daniil Kvyat (22)
10. Romain Grosjean (22)
11. Carlos Sainz (12)
12. Fernando Alonso (8)
13. Sergio Pérez (8)
14. Kevin Magnussen (6)
15. Nico Hulkenberg (6)
16. Jenson Button (3)
17. Stoffel Vandoorne (1)
18. Jolyon Palmer (0)
19. Esteban Gutiérrez (0)
20. Marcus Ericsson (0)
21. Pascal Wehrlein (0)
22. Felipe Nasr (0)
23. Río Haryanto (0 puntos)

Campeonato Mundial de Constructores

1. Mercedes (157 puntos)
2. Ferrari (109)
3. Red Bull-Renault (94)
4. Williams-Mercedes (65)
5. Toro Rosso-Ferrari (26)
6. Haas-Ferrari (22)
7. Force India-Mercedes (14)
8. McLaren-Honda (12)
9. Renault (6)
10. Sauber-Ferrari (0)
11. Manor-Mercedes (0 puntos)